¿Cómo Jesús ayunó por semanas? Esto pasa en el cuerpo cuando dejas de consumir alimentos y bebidas por días

Durante el ayuno, el cuerpo recurre a las reservas de calorías y grasas para preservar el correcto funcionamiento de los órganos como el corazón y el cerebro.

María Camila Sánchez

    ¿Cómo Jesús ayunó por semanas? Esto pasa en el cuerpo cuando dejas de consumir alimentos y bebidas por días

    Durante el ayuno, el cuerpo experimenta una serie de procesos fisiológicos para adaptarse a la falta de alimentos, manteniendo sus funciones vitales y recurriendo a la reserva propia de calorías. Algunos de estos son el agotamiento de glucógeno, cetosis, reducción del metabolismo, entre otros.

    Agotamiento de glucógeno: En esta primera etapa, el cuerpo agota sus reservas de glucógeno, la forma en la que se almacena la glucosa en el hígado y los músculos, y comienza a utilizar la grasa como fuente de energía.

    Cetosis:  Cuando el cuerpo no recibe carbohidratos, entra en un estado de cetosis, donde comienza a quemar grasas para obtener energía, produciendo cetonas como subproducto.

    Reducción del metabolismo: Para conservar un óptimo nivel de energía, el metabolismo basal disminuye, lo que significa que el cuerpo quema menos calorías estando en reposo.

    Protección de órganos vitales: Cuando se realiza ayuno prolongado, el cuerpo prioriza la protección de órganos como el corazón y el cerebro, utilizando la grasa almacenada para mantener su funcionamiento.

    Reciclaje de proteínas: Para obtener los aminoácidos necesarios, el cuerpo recicla proteínas de tejidos no esenciales y células dañadas.

    Inanición

    El proceso de inanición del organismo implica una serie de efectos adversos a medida que el organismo deja de recibir las calorías y los nutrientes necesarios para su funcionamiento. Estas consecuencias afectan a los diferentes sistemas del cuerpo.

    Sistema digestivo: Disminuye la producción de ácido estomacal, el estómago reduce su tamaño (encogimiento), y el paciente experimenta diarrea frecuente (a menudo, mortal).

    Sistema cardiovascular: Al igual que el estómago, el corazón también se encoge, lo que produce una disminución de la cantidad de sangre bombeada, frecuencia cardíaca lenta y baja presión arterial baja. Esto, como consecuencia, produce insuficiencia cardíaca.

    Sistema respiratorio: La respiración se torna lenta debido a la reducción de la capacidad pulmonar que se presenta. Esto produce fallo respiratorio.

    Sistema reproductor: Los ovarios reducen su tamaño, al igual que los testículos. Tanto hombres como mujeres experimentan pérdida de la libido y, por lo general, las mujeres refieren interrupción de la menstruación.

    Sistema nervioso: Los individuos se tornan apáticos e irritables, experimentan entumecimiento u hormigueo en pies y manos. Además, se presenta un deterioro en la función cognitiva, especialmente en niños y adultos mayores.

    Sistema nervioso: Se reduce la capacidad de hacer frente a infecciones, y cicatrizar las heridas.

    Músculos: Hay una reducción del volumen de la masa muscular, y de la fuerza, afectando la capacidad de actividad física y laboral.

    Metabolismo: Se presenta una baja temperatura corporal, y acumulación de líquido en los brazos, las piernas y el abdomen. Además, suele presentarse anemia.

    Piel y cabello: La piel se adelgaza, y se torna seca y carente de elasticidad. El cabello tiende a caerse con facilidad, por lo que se vuelve escaso y seco.

    ¿Por qué Jesús pudo sobrevivir 40 días sin ingerir alimentos o bebidas?

    El tiempo que tarda el cuerpo en morir por inanición, varía dependiendo de factores como la reserva de grasa disponible, edad, peso corporal, estado físico y salud general de la persona.

    Sin embargo, se estima que una persona puede sobrevivir sin comida ni bebida en un lapso de 8 a 21 días. Sin embargo, las Sagradas Escrituras relatan que Jesús ayunó durante 40 días, y esto probablemente fue resultado de una condición física y espiritual óptima, sumado a una buena adaptación fisiológica a los procesos anteriormente mencionados.

    Fuentes consultadas aquí, aquí y aquí.

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