Una investigación revela que la hidroclorotiazida, en dosis estándar, no reduce suficientemente el calcio urinario para prevenir cálculos renales.
Un reciente estudio realizado por el Centro Médico de la Universidad de Vanderbilt (VUMC), publicado en 'JAMA Network Open', ha revelado que las dosis más altas de tiazida se asocian con una mayor reducción del calcio en la orina, lo que podría correlacionarse con una disminución de los eventos sintomáticos de cálculos renales.
Este hallazgo destaca la importancia de ajustar las dosis de este medicamento en la prevención de la recurrencia de cálculos renales.
Acción de los diuréticos tiazídicos
Los diuréticos tiazídicos, comúnmente recetados para prevenir la recurrencia de los cálculos renales, actúan directamente sobre los riñones al inhibir el cotransportador de sodio/cloruro en el túbulo contorneado distal de la nefrona, promoviendo así la diuresis.
Además de su uso en la prevención de cálculos renales, las tiazidas son un tratamiento estándar para la hipertensión arterial y la eliminación de líquidos en condiciones como la insuficiencia cardíaca.
Reevaluación de la hidroclorotiazida
El Dr. Ryan Hsi, profesor asociado en el Departamento de Urología de VUMC y autor principal del estudio, explicó que estos datos resaltan los resultados del ensayo multicéntrico Hidroclorotiazida para la Prevención de la Recurrencia de Cálculos Renales (NOSTONE).
Según Hsi, la hidroclorotiazida no mostró una reducción significativa en la recurrencia de cálculos renales en este estudio, lo que puede explicarse por la pequeña disminución de calcio observada.
"Con base a nuestra investigación, es probable que las reducciones de calcio en este estudio fueran insuficientes para impactar el riesgo de recurrencia", señaló Hsi.
"Esto resalta la importancia de seguir considerando a los diuréticos tiazídicos como una opción viable para la prevención de cálculos renales, con la posibilidad de ajustar la dosis y la dieta para lograr una reducción adecuada del calcio en la orina".
El estudio incluyó a 634 participantes y mostró una asociación significativa entre dosis más altas de tiazidas y mayores reducciones en los niveles de calcio en orina en comparación con los resultados del ensayo NOSTONE.
Próximos pasos en la investigación
De cara al futuro, los investigadores están interesados en explorar qué subtipos de tiazidas y qué regímenes de dosis son más efectivos, además de cómo optimizar la adherencia a la medicación, ya que estos tratamientos generalmente se administran durante largos períodos de tiempo.
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