50 años de dedicación y apuesta por la cura del Mieloma Múltiple: la carrera del Dr. José Sobrino Catoni

El Dr. José Sobrino Catoni, hematólogo oncólogo, miembro y fundador del hospital Hima San Pablo Bayamón y oncólogo del Hospital Oncológico, narra su experiencia y vida.

Isbelia Farías

    50 años de dedicación y apuesta por la cura del Mieloma Múltiple: la carrera del Dr. José Sobrino Catoni

    Precisamente el primer paciente que evaluó como médico culminó con diagnóstico de mieloma múltiple. Para ese entonces el Dr. José Sobrino Catoni solo contaba con dos medicamentos utilizados para ese tiempo, la prednisolona y melfalán. Una vez que estos fallaban, no había más alternativas, pero más tarde surgió una combinación que era muy complicada, con agentes muy tóxicos, y así inició su carrera en la medicina oncológica.

    Sobrino Catoni estudió medicina en la Universidad de Puerto Rico (UPR) e hizo su especialidad en medicina interna para luego sub-especializarse en el campo que aún practica hoy, la hematología y oncología.

    Empezó sus primeros pasos con el reto del VADunas infusiones constantes de medicamentos (Vincristina, Doxorubucina y Dexametasona). Luego de un tiempo estático, surgieron otros productos para apaciguar los síntomas más fuertes para estos pacientes con Mieloma Múltiple, pero provocaban malformaciones fetales. De esta crisis histórica, nació la evolución de los inmunomoduladores.

    Sobrino destaca que lo primero que realiza es la evaluación clínica de estos pacientes, pues algunos llegan con dolores inmensos, que no pueden caminar, pero luego observa cómo cambia este cuadro precisamente con los tratamientos que hoy disponen.

    Actualmente, se tratan a estos pacientes con combinaciones de terapias, donde se les indica otro tratamiento con una secuencia hasta diez, y le dan un mantenimiento con el mismo medicamento, en dosis más bajas, indefinidamente.

    Investigadores franceses documentaron el beneficio del anticuerpo monoclonal en pacientes con mieloma múltiple y encontraron que respuestas significativas, y precisamente figura como la alternativa para aquellos que no son candidatos para trasplante de médula ósea, y esto figura entre las opciones que Sobrino Catoni, padre también de un médico, provee a sus pacientes.

    Recordó a una paciente que llegó a su oficina en una camilla, con unos fuertes dolores en su cuerpo, pero logró vivir una década en salud óptima. Este paciente finalmente sucumbió a la enfermedad luego de tantos años en vida, y marcó a su vez la vida de su médico.

    Igualmente, narró la memoria de una paciente con dolores y luego pudo sobrellevar la condición e incluso integrarse a trabajar. Aunque reconocen que la enfermedad no es curable, entiende que “para los próximos años sí será curable”, debido a los avances que están ocurriendo, afirma el destacado hematólogo oncólogo.

    El hoy destacado médico resalta que cada medicamento tiene una toxicidad, y antes no se fijaban en ello, pero ahora son más conscientes y quieren mejorar al paciente. Han visto casos de personas con dolores horribles y luego están llevando su vida normal.

    Hoy día describe que los pacientes podrían llegar con síntomas leves, y aun así no es sinónimo de que no padezcan de este tipo de cáncer. “Lo más importante es que tenemos los instrumentos para hacer un cambio significativo en el comportamiento de estos pacientes”, enfatiza Sobrino Catoni. 

    El doctor Sobrino se reúne cada año con otros colegas, en congresos, para mantenerse actualizado y conocer de otros casos de pacientes, ampliando así su gama de conocimientos en su área.

    Tiene 50 años de práctica, tiene muchas anécdotas, muchos pacientes y uno en particular que trató para un tumor de Linfoma de Hodgkin, un joven, recuerda el doctor, y hace como un año recibió una carta desde Florida para notificarle que ya era abuelo. Esto hizo sentir mucha alegría al consagrado médico Sobrino, quien ama su profesión. 

    Conozca más a este destacado especialista: 


    Más noticias de Oncología-Hematología