El cáncer de tiroides, aunque en aumento, tiene una tasa de curación muy alta cuando se detecta en fases iniciales. El enfoque multidisciplinario y la experiencia quirúrgica son claves en el éxito del tratamiento.
Con motivo de crear conciencia, expertos han recalcado lo importante que es la detección temprana de las lesiones en la glándula tiroides, ya que en estadios iniciales el índice de curación supera el 95%.
Según el presidente del grupo de trabajo en Tiroides y Paratiroides de la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORLCCC), es fundamental que los nódulos en el cuello reciban una valoración temprana por parte de un otorrinolaringólogo.
Las pruebas complementarias, como la ecografía y la punción, permiten detectar estas lesiones en fases precoces, lo que aumenta las posibilidades de tratamiento exitoso.
Según el informe anual de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), elaborado junto con la Red Española de Registros de Cáncer (REDECAN), se estima que en España se diagnostican más de 6.300 nuevos casos de cáncer de tiroides en 2024.
Este tipo de cáncer afecta mayoritariamente a mujeres, quienes tienen hasta cuatro veces más probabilidades de desarrollarlo que los hombres. La mayoría de los casos se dan entre los 40 y los 60 años.
A pesar del aumento en la incidencia de esta enfermedad, las tasas de supervivencia han mejorado un 15% en la última década, gracias a un enfoque multidisciplinario que incluye a especialistas en endocrinología, otorrinolaringología, cirugía general, oncología y medicina nuclear, entre otros.
El doctor Torrico, miembro de la SEORL-CCC, subrayó que el tratamiento de estos tumores normalmente implica la extirpación quirúrgica de la lesión, un procedimiento realizado por otorrinolaringólogos y cirujanos especializados en la tiroides.
Una de las cirugías más comunes es la tiroidectomía, que en ocasiones deja secuelas en el paciente, tales como problemas en la voz o alteraciones en el metabolismo del calcio. En este sentido, el doctor Alex Sistiaga, presidente de la Comisión de Oncología y Cirugía de Cabeza y Cuello de la SEORL-CCC, explicó que la intervención puede derivar en complicaciones postquirúrgicas, como la parálisis de cuerdas vocales o disfagia, lo que requiere un seguimiento especializado.
Los otorrinolaringólogos están específicamente capacitados para realizar tanto la evaluación prequirúrgica como el tratamiento de las alteraciones postquirúrgicas. La SEORL-CCC ha desarrollado un documento de posicionamiento donde destaca que estos especialistas tienen el conocimiento necesario para gestionar complicaciones como la parálisis unilateral o bilateral de las cuerdas vocales y los trastornos de la deglución que pueden surgir tras una tiroidectomía.
Para asegurar una atención integral y de calidad, la SEORL-CCC ha implementado un sistema de acreditación para las Unidades de Cirugía de Tiroides y Paratiroides, presentes en los Servicios de Otorrinolaringología de numerosos hospitales en España.
Este sistema busca fomentar la colaboración entre profesionales de distintas especialidades médicas en un entorno multidisciplinario, con el objetivo de mejorar el manejo de los pacientes y dar respuesta a las demandas de las asociaciones de pacientes en cuanto a la mejora de la atención.
Fuente consultada aquí.