El síndrome de la serotonina es una reacción farmacológica grave.
Aunque los suplementos naturales fungen como una alternativa para el control de ciertos síntomas asociados a diversas enfermedades o como potenciadores vitamínicos, en literatura se advierte sobre el cuidado en el uso de estos cuando un paciente ingiere algún tratamiento específico, por el riesgo de interacción y toxicidad.
Precisamente esta es la conciencia que se genera a raíz de un caso en Puerto Rico, donde una paciente 16 de años de edad presentó movimientos involuntarios recurrentes del cuello con movimientos oculares del ojo izquierdo y desviación de la quijada hacia al lado izquierdo un día previo a la admisión hospitalaria en el Centro Médico Episcopal San Lucas de Ponce.
Dentro del historial clínico de la paciente se encontró depresión y ansiedad para lo cual tomaba escitalopram, un medicamento antidepresivo que inhibe la recaptación de serotonina, sustancia química que el cuerpo produce de forma natural y necesaria para que las células nerviosas y el cerebro funcionen.
"Sin embargo, unos días previos a la admisión, la madre le compra unos medicamentos naturales, recomendada por un vecino, llamado St. John Wort y el Ashwagandha, utilizados también para tratar la depresión y ansiedad. Sin embargo, estos suplementos naturales no siempre están libres de efectos secundarios y especialmente el St. John Work tiene muchas interacciones con medicamentos y trabaja en el mismo lugar de acción que trabaja el escitalopram, así aumentando su poder de toxicidad", explicó el Dr. Carlos A. Ramirez Mongil, del Programa de Residencia Pediatría del Centro Médico Episcopal San Lucas en Ponce, autor del caso junto al Dr. Orlando Torres, catedrático de la Ponce Health Science University, entre otros.
St. John Wort es una hierba usada a través de cápsulas, en la medicina alternativa, como una ayuda en el tratamiento de la depresión leve a moderada, ansiedad o insomnio. Mientras, la Ashwagandha es un arbusto de hoja perenne que se usa comúnmente para el estrés.
"Se puede considerar que esto fue el detonante del síndrome de serotonina en este paciente y es un síndrome diagnosticado clínicamente (...), que causa movimientos involuntarios, usualmente en el cuello, también puede presentar un estado de inconsciencia alterado, hipertermia, entre otros. La paciente fue admitida donde en el examen físico se notó ansiosa, con mioclono, movimiento involuntario del ojo, y también tenía edema en las extremidades inferiores y el reflejo de las piernas aumentado", abundó.
El síndrome de la serotonina es una reacción farmacológica grave. Se debe a medicamentos que generan la acumulación de niveles altos de serotonina en el cuerpo.
La paciente arrojó niveles normales en estudios como el ECG, CT de cabeza, CBC, CMP, entre otros. La paciente se manejó con observación y se le administró benzodiazepinas para calmar su estado de ansiedad y calmar los síntomas.
"Siempre se le debe consultar al médico cuando se decida ingerir algo natural, ya que puede tener interacciones con los medicamentos que el paciente pueda estar tomando. El síndrome de serotonina no solo se ve en adultos, sino también en pacientes pediátricos", concluyó.