Catéter R2P: Innovación en intervenciones arteriales para pacientes en Puerto Rico

Esta nueva técnica reduce el tamaño de la incisión y facilita una recuperación más rápida. Una vez finalizado el procedimiento y pasado el efecto de la anestesia o sedación moderada, el paciente puede caminar en pocas horas, siempre y cuando no sea necesario acceder desde la arteria femoral.

Katherine Ardila

    Catéter R2P: Innovación en intervenciones arteriales para pacientes en Puerto Rico

    A tono con los avances de la tecnología, desde hace varios meses ya está disponible en Puerto Rico un nuevo dispositivo para pacientes con enfermedad arterial periférica (EAP) y otras condiciones que ameriten un desbloqueo de sus arterias, especialmente las de sus extremidades inferiores.

    El Dr. Sameh Sayfo, cardiólogo intervencional del Baylor Heart Hospital en Plano, Texas, quien estuvo recientemente en la isla participando como panelista en el Congreso de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología Intervencional (SPCI) 2024, compartió en una entrevista en exclusiva para la revista , un poco de su experiencia en EE.UU. UU. con este tratamiento, a la vez que resaltó el respaldo científico detrás de esta tecnología

    "Hemos aprendido realmente pronto que es un procedimiento más seguro, es eficaz, es menor el riesgo de complicación", explica. "En nuestro hospital, hemos publicado un documento hace un par de meses. Se trata de nuestros primeros 140 pacientes, de todos los que vienen. Fue publicado en AJC, American Journal of Cardiology, y mostró un resultado muy seguro y eficaz".

    Además, aclaró que las preocupaciones iniciales sobre el riesgo de accidentes cerebrovasculares han sido descartadas. "La mayor preocupación es si aumentamos el riesgo de ictus. Nos demostramos que eso no es cierto. Sólo tuvimos un paciente, menos del uno por ciento de la población".

    De hecho, asegura que "si le pregunta a cualquiera de los pacientes, ¿cuál es la única cosa que realmente no le gusta cuando están en el hospital? Está durmiendo en el hospital. Todo el mundo quiere quedarse en casa con su familia y su entorno", explica. 

    "Por lo que esta tecnología, que va desde la arteria radial con una pequeña arteria en la muñeca, es más segura, tiene menos riesgo de complicación y por lo general los pacientes después del procedimiento, en un par de horas se van a casa" . 

    Recomendaciones para Puerto Rico

    Al abordar cómo se puede adaptar esta tecnología en Puerto Rico, el doctor Sayfo concluyó expresando su confianza en los médicos locales. 

    "Puerto Rico tiene un operador increíble, muy hábil". Sin embargo, recordó que, en todo caso, contar con la tecnología adecuada para garantizar el éxito de los procedimientos es supremamente importante.

     "Lo único que realmente se requiere es tener la tecnología adecuada... Así que hay que asociarse con las empresas que tienen tecnología avanzada y asegurarse de que tienes los dispositivos adecuados".

    Para seguir investigando y ahondando más en esta nueva técnica, desde la Revista MSP, nos comunicamos con diferentes especialistas en el área, como los doctores David Heredia, Bayoan Ramos y Jonathan Cordero, cardiólogos intervencionales; el Dr. Jorge Weber y el Dr. Gabriel Pereira, dos de los pocos cirujanos vasculares que hay en el país; el Dr. Alejandro Hidalgo, radiólogo intervencionista; y otros expertos, quienes, desde sus especialidades, explicaron todo acerca de este avance. 

    ¿Qué es la cirugía radial periférica?

    En primer lugar, y para darnos un contexto, el Dr. Jonathan Cordero, cardiólogo intervencional, explicó que "periferovascular es cualquier arteria que está alejada del corazón, incluye las arterias que están en los brazos, las arterias que están en el cuello, que son las carótidas, las arterias que están en la barriga, y las arterias que están en las piernas", dijo. 

    Ahora bien, el acceso radial para intervenciones periféricas es una tecnología creada por la compañía Terumo, quienes desarrollaron introductores y el equipo necesario para acceder desde la arteria radial y poder llegar a los miembros inferiores y colocar balones o "stents" (mallas). Este método permite a los médicos acceder a la arteria radial, que se encuentra en la parte superior del brazo, para realizar intervenciones en las extremidades inferiores. Los especialistas capacitados para ejecutarlo son los cardiólogos intervencionales, cirujanos vasculares y los radiólogos intervencionales.

    De acuerdo con el Dr. Gabriel Pereira, cirujano cardiovascular, entrar directamente al área del fémur asegura un trayecto más corto a las arterias inferiores, así como mayor manejabilidad del producto. No obstante, advirtió, penetrar por este acceso aumenta las posibles complicaciones para el paciente. 

    Algunas de las posibles complicaciones que mencionaron el galeno son: rotura de las arterias, hematomas, taponar las arterias y sangrado interno profuso que obliga al paciente a recibir muchas transfusiones de sangre, entre otras.

    En cambio, el cirujano vascular, Dr. Jorge Weber, sostuvo que acceder por el brazo evita muchas de estas posibles dificultades. "Uno puede entrar por la arteria del brazo y trabajar cualquier extremidad inferior (con el R2P)", comentó.

    La primera intervención radial periférica de largo alcance en Latinoamérica fue hecha en Puerto Rico  

    A pesar de que este novedoso procedimiento desarrollado por Terumo ya era utilizado por los médicos en Estados Unidos, no es hasta el pasado mes de octubre que se realizó la primera intervención de este tipo en toda Latinoamérica. Esta se llevó a cabo en Puerto Rico en el Hospital Menonita de Cayey por el doctor Bayoan Ramos, especialista en cardiología intervencional. 

    Luego le siguieron el doctor Alejandro Hidalgo, radiólogo intervencional y el doctor Jonathan Cordero, cardiólogo intervencional, quienes realizaron por separado la segunda y tercera operación con este avance en el hospital Doctors´ Center en Bayamón y Pavía en Arecibo respectivamente. 

    Sobre su primera experiencia utilizando este método, Hidalgo detalló que lo realizó en un paciente que presentaba claudicación en una pierna, síntoma de la enfermedad arterial periférica, que consiste en el estrechamiento de los vasos sanguíneos fuera del corazón.

    ¿Cómo se lleva a cabo el procedimiento?

    Tradicionalmente, las intervenciones que se realizaban a través del acceso femoral implicaban una incisión más grande y una recuperación prolongada. 

    "Pero a medida que ha pasado el tiempo nos hemos dado cuenta de que brindar otro acceso (braquial o radial, ambos en el brazo) es más beneficioso para el paciente", dijo el doctor Hidalgo.

    Esta técnica minimiza el tamaño de la incisión y permite una recuperación más rápida. Según el doctor David Heredia, especialista en cardiología intervencional, después del procedimiento, el paciente puede recuperarse y caminar pocas horas después. "Podemos decir que el paciente puede, inmediatamente terminado el proceso, y la anestesia haber pasado su efecto, ambular si no hay ningún tipo de complicación en este procedimiento". 

    Esto cambia mucho el panorama de la intervención, pues "anteriormente se debía tener más precauciones porque el acceso era a las extremidades inferiores", dice. "Ahora, la recuperación de estos pacientes para incorporarse a sus actividades diarias es cuestión de horas, dos o tres horas después de haber terminado el procedimiento". 

    "El paciente está sedado, pero despierto. No requiere intubación ni anestesia general, lo que evita riesgos y complicaciones, además de menos oportunidad de sangrado", complementa el doctor Hidalgo.

    "Usualmente, cuando los pacientes se están quejando de mucho dolor en las piernas al caminar o ya tienen úlceras, en los próximos días después del procedimiento se empiezan a notar esos cambios", abundó para la Revista el doctor Ramos. 

    "Tenemos los mismos beneficios que teníamos con los métodos convencionales, pero lo estamos haciendo a través de un método más seguro donde el paciente se puede recuperar más rápido", añadió.

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    ¿Qué condiciones pueden tratarse con esta técnica?

    Este procedimiento es efectivo para tratar diversas enfermedades, incluyendo enfermedades periféricas obstructivas, úlceras crónicas arteriales, coágulos y trombos.

    En este caso, la enfermedad arterial periférica es una afección caracterizada por la reducción del flujo sanguíneo a las extremidades, principalmente a las piernas, como resultado del estrechamiento de las arterias debido a la ateroesclerosis (acumulación de depósitos grasos en las paredes arteriales). 

    Según información recogida de Mayo Clinic, este proceso patológico genera un suministro insuficiente de sangre para satisfacer las demandas metabólicas de los tejidos. Clínicamente, se manifiesta comúnmente como claudicación intermitente, un dolor muscular que aparece durante la deambulación y se alivia con el reposo. 

    Dolor al caminar, gangrena, posible amputación y mayor riesgo de enfermedad cardíaca, aneurisma aórtico y accidente cerebrovascular son algunas de sus consecuencias.

    "Es una enfermedad bien prevalente en gente mayor. Disminuye el flujo de sangre a las extremidades y causa un proceso inflamatorio en las arterias", sostuvo el Dr. Pereira al comentar que la incidencia mayor es en personas de 80 años o más.

    Por otro lado, según el Dr. Weber, pacientes con enfermedad aortoiliaca (condición en la que se destruye la aorta o las arterias ilíacas), que sean obesos o que hayan tenido cirugías previas en el área inguinal son posibles candidatos a este procedimiento.

    De hecho, el doctor Heredia resaltó que: "Se utiliza esta tecnología para tener un mejor beneficio y conveniencia para el paciente que sufre de cualquiera de estas condiciones".

    La rapidez en la recuperación es supremamente importante para aquellos que sufren dolor severo al caminar, ya que les permite reincorporarse a sus actividades cotidianas en cuestión de horas.

    Sin embargo, el diagnóstico temprano de esta enfermedad es todo un desafío debido a que los síntomas suelen confundirse con otras afecciones. 

    "El dolor en las piernas puede ser de muchas cosas, desde neuropatía diabética, hasta insuficiencia venosa, nervios pillados o dolores musculares. Los pacientes tienden a no darse cuenta hasta que llegan a nosotros, y usualmente están bastante avanzados", comentó por su parte el doctor Ramos.  

    Acceso a la cirugía radial periferal

    Ahora, "los pacientes en Puerto Rico tienen disponible esta tecnología, y si la persona tiene las condiciones idóneas de las arterias en el acceso, pues se beneficiará de este procedimiento", menciona con orgullo el Dr. Heredia.

    Lo único que los limitaría, que es una cosa más técnica, es que tengan la arteria radial muy pequeña, pero usualmente en la gran mayoría de los casos tienen un tamaño adecuado para poder hacer el procedimiento", agregó el Dr. Ramos.  

    Con la llegada de esta nueva tecnología en el área de la salud, están brindando una nueva esperanza para quienes sufren de condiciones vasculares; ya que además de mejorar la atención médica, también facilitan una recuperación más rápida y segura para los pacientes, mejorando su calidad de vida. 

    Como enfatizó el Dr. Cordero: "Nosotros buscamos mejorar esa circulación para disminuir la claudicación, disminuir las amputaciones y mejorar la curación de las piernas con las úlceras".

    Rol de la educación médica continua en estos nuevos tratamientos

    La educación continua juega un rol bastante importante en la implementación de avances en procedimientos vasculares como las intervenciones radiales y periféricas. 

    Estas innovaciones, como el catéter R2P, requieren que los médicos, en este caso, cardiólogos intervencionistas, cirujanos vasculares y radiólogos intervencionistas, se mantengan actualizados con las últimas técnicas y dispositivos disponibles.

    Además, es un requisito que le exige el gobierno de Puerto Rico a todos los médicos del país para mantener su licencia profesional. Así lo afirmó el doctor Ricardo Santiago, presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología Intervencional (SPCI), durante un simposio reciente.

    "Este congreso ha evolucionado de solo (la asistencia de) cardiólogos intervencionales a todo tipo de cardiólogos, como electrofisiólogos, cardiólogos generales y especialistas de fallo cardíaco", dijo el también director del Laboratorio de Cateterismo Cardíaco e Intervención Compleja de Alto Riesgo del Bayamón Heart. y Instituto del Pulmón (BHLI), proyecto del Centro Médico de Bayamón.

    Este simposio organizado por la SPCI brindó a los profesionales la oportunidad de aprender de expertos internacionales y compartir estrategias para optimizar los tratamientos.

    La meta, según concluyó el Dr. Santiago, es que el paciente se sienta bien, prolongando su existencia y brindándoles la mejor calidad de vida posible. 

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