El Melanoma, es una afección cancerosa de la piel, que según expertos en oncología, está aumentando en Puerto Rico. Conversamos con el Dr. Hiram Ruiz, dermatólogo, para entender un poco más sobre la incidencia de esta condición.
Uno de los factores clave en la creciente incidencia de melanoma es el diagnóstico temprano, facilitado por los avances tecnológicos en la detección. Aunque el incremento no es dramático ni llega a niveles de epidemia, sí es suficiente para justificar una atención cuidadosa y continua. "La probabilidad de metástasis es directamente proporcional al grosor del melanoma", señala el Dr. Ruiz. Detectando que el melanoma en sus etapas iniciales puede hacer una gran diferencia en el pronóstico del paciente.
El melanoma es un tipo de cáncer que afecta a los melanocitos, las células responsables de producir la pigmentación en la piel. "Este cáncer puede ser especialmente peligroso debido a su capacidad para metástasis, es decir, para diseminarse a otras partes del cuerpo", explicó el Dr. Hiram.
Según el especialista, "el melanoma no es el cáncer de piel más común, pero sí puede ser el más mortal, afectando a personas jóvenes entre 30 y 45 años. Hay que hablar más del control de la condición que de una cura. El melanoma ataca esencialmente las células que producen la pigmentación en la piel. Es el carcinoma de los melanocitos".
Los melanocitos son las células que producen el pigmento conocido como melanina. Se puede decir que el melanoma es la parte maligna de un lunar. Un lunar es un crecimiento benigno de melanocitos, y cuando este crecimiento se vuelve maligno, se le llama melanoma.
Según el experto, "básicamente, lo que hay que observar son los lunares. Siempre hemos hablado de estar pendientes de los cambios en los lunares, como bordes irregulares y colores irregulares. Sin embargo, en la mayoría de los casos, el melanoma aparece directamente como melanoma y no es que un lunar se transforme en melanoma tras muchos años. Para el paciente, puede ser difícil diferenciar un lunar de una manchita negra típica de melanoma".
Con el tiempo, un melanoma puede mostrar colores diferentes y bordes irregulares. No se parece a los demás lunares en el resto del cuerpo, por lo que siempre se recomienda chequear cualquier lunar que cambie, sangre o sea diferente a los demás. Un lunar que tenga pedazos negros o múltiples colores podría ser un melanoma.
El Dr. Hiram enfatiza la importancia de la autoexaminación y las consultas regulares con dermatólogos. Recomienda seguir la regla del "ABCDE" del melanoma: Asimetría, Bordes irregulares, Color variado, Diámetro mayor de 6 mm y Evolución en el tiempo. Además, sugiere que cualquier persona con factores de riesgo elevados (piel clara, historial de quemaduras solares severas, múltiples lunares, antecedentes familiares de melanoma) se someta a revisiones dermatológicas periódicas.
Vea el programa completo
La primera parada tiene que ser el dermatólogo antes que el oncólogo. Uno de los factores de riesgo es tener la tez bien blanca y un historial de haber estado expuesto mucho al sol. Estas quemaduras, son un riesgo significativo; por ejemplo, quedarse dormido y terminar con ampollas. Dos quemaduras de ese tipo aumentan la probabilidad de desarrollar melanoma a lo largo de la vida.
"Si alguien tiene más de 100 lunares, también es un factor de riesgo. Además, si ha tenido un miembro de la familia directa que haya tenido melanoma, o si tiene condiciones que pueden afectar su sistema inmunológico, como inmunosupresión, albinismo, o vitiligo generalizado, necesita un examen un poco más riguroso que alguien sin estos factores". Explicó el Dr. Hiram.
Cualquier persona que tenga un lunar con las clasificaciones ABCD debe chequearlo, aunque se vea sospechoso. El procedimiento de la biopsia es muy sencillo. No estamos hablando de una biopsia de médula ósea ni de hígado que requieren anestesia general o hospitalización. La biopsia de un lunar se hace en cinco minutos y en dos semanas se obtiene el resultado. Se realiza con anestesia local y se extrae parte de la lesión para su análisis.
En cuanto a la incidencia del melanoma en Puerto Rico, el Dr. Hiram menciona que el aumento podría estar relacionado con una mejor capacidad de diagnóstico, aunque no descarta factores como la mayor exposición al sol debido a cambios en los hábitos o el cambio climático.
Así mismo, el Dr. Hiram advierte sobre la proliferación de clínicas no certificadas que ofrecen remover verrugas o lunares, ya que esto puede retrasar el diagnóstico y tratamiento adecuado del melanoma, aumentando el riesgo para los pacientes.