La experta recomienda tomar vitaminas que contienen hierro y calcio al menos cuatro horas después de la medicación tiroidea, para una absorción adecuada del medicamento.
El hipotiroidismo es una condición común que afecta a una parte significativa de la población, especialmente en Puerto Rico, donde se estima que alrededor del 20% de las personas padecen algún tipo de trastorno tiroideo. En el marco de la convención semianual de la Sociedad Puertorriqueña de Endocrinología y Diabetología, la Dra. Marielly Sierra, reconocida endocrinóloga abarca el tema sobre las actualizaciones en el manejo del hipotiroidismo y su manifestación actual en Puerto Rico.
La Dra. Sierra nos explica que el hipotiroidismo es "nada más y nada menos que la deficiencia de la tiroidea en el cuerpo ". La tiroides es una glándula vital que regula diversas funciones metabólicas, incluyendo el sistema digestivo, neurológico y el estado de ánimo. Cuando la tiroides no produce suficiente hormona, se desarrolla el hipotiroidismo.
El hipotiroidismo se presenta cuando la glándula tiroides no produce suficiente hormona tiroidea necesaria para el metabolismo del cuerpo. Según la Dra Sierra, en Puerto Rico, la prevalencia de esta condición es notablemente alta "nosotros tenemos una buena predisposición genética a lo que son condiciones de hipotiroidismo y se estima que por lo menos hay un 20% de la población con condiciones de tiroides siendo el hipotiroidismo la condición más común."
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Los síntomas principales del hipotiroidismo se manifiestan como una disminución en diversas funciones corporales debido a la falta de hormona tiroidea. Según la experta, "esta persona se va a sentir más cansada, quizás está un poco más bajo en estado de ánimo, un poco más depresivo, esta persona también va a tener mucho más sueño. Puede tener el pulso cardíaco disminuido, podemos tener también el tránsito intestinal mucho más lento, así que podemos tener estreñimiento y sequedad de la piel ". Además, menciona que aunque el cabello no necesariamente se cae, se vuelve más seco y frágil, pudiendo partirse con facilidad. También puede haber un aumento mínimo de peso, de entre un 3% a un 10%, principalmente debido a la retención de líquidos.
Es crucial aclarar que el hipotiroidismo no causa obesidad. La Dra. Sierra enfatiza: "La tiroides no nos hace engordar. Simplemente, cuando estamos en un estado hipotiroideo severo, no tratado, tenemos una retención de líquido y sales en el tejido". Una vez se inicia el tratamiento y el metabolismo vuelve a funcionar correctamente, esta retención de líquidos se revierte y se recupera el peso habitual antes del desarrollo del hipotiroidismo.
El diagnóstico del hipotiroidismo se realiza principalmente mediante la medición de la hormona TSH, liberada por la glándula pituitaria para estimular la tiroides. "La TSH es la prueba primordial para nosotros poder diagnosticar un desorden de tiroides", explica la Dra. Sierra. Un nivel elevado de TSH, junto con niveles bajos de T3 y T4, confirma el diagnóstico de hipotiroidismo.
El tratamiento consiste en la administración de levotiroxina, una hormona tiroidea sintética, que debe tomarse de por vida. La Dra. Sierra enfatiza que es crucial adherirse a la terapia y tomar la medicación en ayunas, esperando al menos 40 minutos antes de consumir alimentos para asegurar una absorción óptima. "Debemos de ser 100 % adherentes a nuestra terapia", señala.
La falta de adherencia al tratamiento puede llevar a complicaciones cardiovasculares y metabólicas a largo plazo. "Una persona con hipotiroidismo puede tener a largo plazo repercusiones cardiovasculares, repercusiones en lo que es el mantenimiento de las grasas y colesterol a nivel sanguíneo", dice la especialista. La adherencia estricta asegura que los pacientes se mantengan en un estado óptimo de salud y eviten complicaciones como el aumento del colesterol "malo".
Para las mujeres embarazadas, la Dra. Sierra indica que "las mujeres embarazadas que ya tenían hipotiroidismo y están en tratamiento necesitan un aumento de su dosis de un 30 -50 % de acuerdo a su nivel de TSH." Explica que esto se debe a que los niveles elevados de estrógeno durante el embarazo requieren más hormona tiroidea en el torrente sanguíneo. Los niveles de TSH deben ser monitoreados y mantenidos dentro de rangos específicos por trimestre para evitar complicaciones como preeclampsia, aborto espontáneo, y problemas neuromusculares en los niños.
En cuanto a los envejecientes, la experta advierte sobre la necesidad de ser cuidadosos con el diagnóstico y tratamiento del hipotiroidismo, dado que los signos pueden confundirse con el envejecimiento normal. "Tenemos que ser bien cuidadosos con ellos" debemos estar 100 % seguros de que están desarrollando un hipotiroidismo o que esto sea simplemente un proceso natural de nuestro cuerpo." Añade que es importante vigilar los signos y síntomas, y que no es recomendable sobremedicar a los envejecientes debido al riesgo de arritmias cardiacas y otras complicaciones.
El hipotiroidismo y la diabetes tipo 1 comparten una causa común de índole inmunológica. La Dra. Sierra señala que "el hipotiroidismo, en su causa más común, es inmunológica, así que tenemos un tipo de diabetes que también es de índole inmunológica, que es la diabetes tipo 1. Y en personas que ya contienen condiciones inmunológicas están predispuestos a tener otra. Así que puede haber un riesgo aumentado de desarrollar ese tipo de diabetes tipo 1."
La obesidad, por su parte, es una condición con causas multifactoriales. La Dra. Sierra aclara que "obesidad e hipotiroidismo no son equivalentes. La obesidad tiene causas multifactoriales, estilo de vida sedentario, como nos alimentamos, genéticos..." Añade que una persona con hipotiroidismo no tratado puede experimentar retención de líquidos, lo que podría parecer un aumento de peso.