Los accidentes cerebrovasculares son la quinta causa de muerte en mujeres, según los CDC.
La fibrilación atrial, se caracteriza por un aumento considerable en la cantidad de latidos del corazón por minuto, siendo esto consecuencia de una alteración en el sistema eléctrico del corazón. Además, es la arritmia cardíaca más común en la población envejeciente de Puerto Rico.
Y si bien hay varios factores de riesgo prevenibles o modificables relacionados al desarrollo de esta condición y sus complicaciones, el Dr. Edmundo Jordán, cardiólogo y anterior presidente de la Sociedad Puertorriqueña de Cardiología, mencionó a la Revista Medicina y Salud Pública que las mujeres tienen un mayor riesgo de padecer un accidente cerebrovascular por fibrilación atrial.
"Si es mujer, ya tiene un punto mayor que los varones en el riesgo de un evento cardiovascular. Por eso, el uso de los anticoagulantes es de suma importancia en el tratamiento de los pacientes con fibrilación atrial".
Debemos tener en consideración que, los accidentes ACV, también conocidos como ICTUS, son la quinta causa de muerte en mujeres. De hecho, según los CDC, se estima que 1 de cada 5 mujeres estadounidenses entre los 55 y 75 años sufrirá un evento cerebrovascular.
Aún así, lo más preocupante de todo esto es que, ante esta alarmante cifra, muchas mujeres no conocen su riesgo cerebrovascular que puede ser prevenible en 4 de cada 5 casos.
La hipertensión arterial, junto con la diabetes y la obesidad, son factores de riesgo cruciales para el desarrollo de fibrilación auricular. En América Latina, aproximadamente una de cada tres mujeres sufre de hipertensión, una de cada nueve tiene niveles elevados de azúcar en sangre y cerca de la mitad de las mujeres hispanas está afectada por la obesidad.
"Yo voy a tratar al paciente bajándole la frecuencia cardíaca con el uso de diferentes medicamentos. Lo que más utilizamos los cardiólogos son los betabloqueadores, como el famoso metoprolol y entre otros más para bajar la presión arterial alta".
Es importante contar con un monitoreo constante de la presión arterial, de este modo es más seguro detectar cualquier anomalía en su salud antes de desarrollar alguna complicación más grave.
Del mismo modo, los CDC recomiendan manejar adecuadamente los niveles de colesterol alto, aplicando cambios en el estilo de vida, y siguiendo el tratamiento recomendado en caso de que lo necesite.
Asimismo, reduzca al mínimo su consumo de tabaco, haga actividad física con regularidad y prefiera una alimentación sana.
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