En los últimos años se ha observado el aumento de diabetes tipo 2 en niños y adolescentes debido a las tasas crecientes de obesidad y sedentarismo.
La insulina y su influencia es crucial para la transformación de alimentos en energía y sobre todo para el control de la glucosa en sangre luego de la ingesta de comidas. Es por eso que cuando ocurre una insuficiencia o por el contrario, como ocurre en la resistencia a la insulina , se agotan las reservas naturales de insulina es que surge la diabetes en sus diferentes formas. En la Revista MSP, conversamos sobre este importante tema con la Dra. Isabel Arroyo, endocrinóloga del Departamento de Endocrinología del Hospital Universitario de Adultos para definir más claramente el papel de la insulina y su impacto en el desarrollo de diabetes.
Función de la insulina y sus implicaciones
La especialista explica que el páncreas produce una hormona llamada insulina, que facilita la entrada de azúcar en en las células del cuerpo después de descomponerlo molecularmente: “Si el cuerpo no produce suficiente insulina, el azúcar se acumula en el torrente sanguíneo, lo que puede desencadenar varias enfermedades, como enfermedades cardíacas, pérdida de visión, problemas renales e infecciones de la piel”.
Síntomas de la diabetes
Cabe destacar que hay diferentes tipos de diabetes cuando la glucosa en sangre es anormal. La Dra. Arroyo destaca los síntomas característicos de la diabetes tipo 1 y 2, que incluyen poliuria (aumento de la frecuencia urinaria), polidipsia (sed excesiva), fatiga o cansancio, pérdida de peso involuntaria, visión borrosa, hormigueo en manos y pies, piel seca, y una mayor susceptibilidad a infecciones como hongos.
Asimismo, aclara que la diabetes tipo 1 se caracteriza por una insuficiente producción de insulina o una producción muy limitada por parte del páncreas, y suele especialmente afectar a niños, adolescentes y adultos jóvenes de forma autoinmune: “Aunque esta forma de diabetes no es prevenible, es manejable mediante un estilo de vida saludable y la administración de inyecciones de insulina”.
Diabetes tipo 2 y su relación con la obesidad
La especialista menciona que la diabetes tipo 2 es la forma más común y suele afectar a adultos entre 40 y 45 años, aunque en los últimos años se ha observado en niños y adolescentes debido a las tasas crecientes de obesidad y: “Algunos pacientes pueden controlarla con cambios en su estilo de vida, muchos necesitarán medicamentos, ya sean orales o inyectables, e incluso insulina” aclara la endocrinóloga.
Asimismo, la especialista destaca que el manejo de la diabetes involucra a un equipo de atención médica variado que incluye al médico de cabecera, endocrinólogo, nefrólogo, oftalmólogo, un nutricionista y hasta un educador de la diabetes.
Tratamientos y cuidados para diferentes tipos de diabetes
El tratamiento de la diabetes varía según el tipo. Para la diabetes tipo 1, se requieren inyecciones de insulina diarias y, en algunos casos, se puede utilizar una bomba de insulina. En el caso de la diabetes tipo 2, se pueden usar medicamentos orales de larga y corta duración como la metformina o la dapaglifozina, fármacos combinados para potenciar su efecto, inyectables o insulina. Además, es fundamental medir regularmente los niveles de azúcar en sangre, controlar la presión arterial y el colesterol, mantener una nutrición adecuada en cada carga o comida y hacer ejercicio, para estimular el control de la glucosa muscular.
Educación sobre la diabetes
La Dra. Arroyo enfatiza la importancia de recibir educación sobre la diabetes para aprender a medir los niveles de azúcar en sangre, reconocer signos y síntomas de niveles anormales de azúcar, e inyectarse insulina si es necesario. También, enfatiza en la necesidad de tener pautas sobre cómo lidiar con el estrés y cuidados diarios necesarios para el diagnóstico en el aspecto de la salud mental, pues la diabetes es una enfermedad crónica que tiende a provocar episodios de depresión y ansiedad.