En Puerto Rico, se estima que alrededor de 25 mil personas están diagnosticadas con esta enfermedad, una cifra que podría duplicarse.
En honor al día mundial de la enfermedad de Parkinson, conversamos con Luz Eneyda Parilla, directora ejecutiva de la Asociación Puertorriqueña de Parkinson.
La enfermedad de Parkinson es un trastorno cerebral que afecta el movimiento, la cognición, el sueño, el dolor y otros aspectos de la salud. Esta enfermedad progresa con el tiempo y, aunque no tiene cura, existen tratamientos y medicamentos que pueden aliviar los síntomas.
Para comenzar, es importante destacar que el párkinson no se limita al temblor; otros síntomas como la rigidez muscular, dificultades para caminar y la lentitud generalizada en el cuerpo pueden ser indicadores. Además, algunos síntomas pueden ser mentales, como la depresión.
"Aunque la enfermedad no tiene una edad específica de inicio, suele manifestarse después de los 60 años, aunque el diagnóstico puede presentarse hasta 10 años antes de que aparezcan los síntomas". Afirmó Luz Parilla.
El tratamiento del párkinson abarca diversas áreas, desde el farmacológico hasta servicios multidisciplinarios que incluyen terapia del habla, actividad física, ocupacional y psicológica. El impacto en el habla del paciente resalta la importancia de estas terapias.
Por otro lado, aunque no se ha demostrado que el párkinson sea fatal, las complicaciones derivadas de la enfermedad pueden llevar al fallecimiento. Según Parilla, "no existe una cura para el párkinson, se puede tratar y controlar, permitiendo una vida plena y de calidad".
A medida que aumenta la conciencia sobre los síntomas del párkinson, es crucial estar atentos a las señales y buscar apoyo temprano.
La Fundación Puertorriqueña de Parkinson, fundada en 1987 por una destacada neuróloga, ofrece un apoyo integral que va más allá del paciente, abarcando a sus familias.
El movimiento inició con un grupo de apoyo, luego fue evolucionando en su fase educativa. "Comenzamos a ofrecer estos servicios disciplinarios terapéuticos, a los pacientes, a los fundadores y a sus familias". Afirmó Luz Eneyda Parilla.
Según la directora ejecutiva "es una fundación sin fines de lucro, que ofrece servicios gratuitos mediante varios acuerdos de colaboración con distintas universidades y programas de Estados Unidos".
Se ofrece terapia del habla, ejercicios físicos, musicoterapia, terapia psicológica, terapia ocupacional y otros servicios alternativos que se han comprobado científicamente que tienen una gran efecto en la vida del paciente, como el yoga y la danza terapia.
A través de este compromiso, la organización busca mejorar la calidad de vida de aquellos afectados por esta enfermedad.
Más de 50 personas se encuentran afiliadas actualmente a la fundación. Así mismo la directora ejecutiva de la fundación invita a las personas a que visiten la página web para obtener más información.