Los estados donde se presentaron los casos son Texas y Florida, con 1 y 4 casos respectivamente.
Cinco nuevos casos de malaria registrados en Florida y Texas han generado preocupación en Estados Unidos. Aunque los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de ese país (CDC) aseguran que la posibilidad de un brote a gran escala es "extremadamente baja", advierten que el calentamiento global podría incrementar la incidencia de la enfermedad en áreas donde no es endémica.
Lo cierto es que la mayoría de los casos de malaria en Estados Unidos han sido reportados en personas que han viajado a regiones con alta prevalencia de la enfermedad, y no dentro del país. Se cree que los mosquitos son los portadores del parásito responsable de la malaria, lo que ha encendido las alarmas sanitarias.
Estelle Martin, entomóloga de la Universidad de Florida, en una entrevista con Vox aseguró que "siempre es preocupante que haya transmisión local en un área", y destaca que el cambio climático está desempeñando un papel en la propagación de enfermedades transmitidas por vectores en Estados Unidos.
¿Cómo se transmite?
Es importante tener en cuenta que la malaria no se transmite de persona a persona, sino a través de la picadura de mosquitos hembra infectados. Los últimos casos de transmisión local de malaria en EE.UU. ocurrieron hace 20 años, con ocho casos reportados en el condado de Palm Beach, Florida. Además, el Departamento Estatal de Servicios de Salud de Texas informó que la última transmisión local de malaria en el estado fue en 1994.
Ante esta situación, el Departamento de Salud de Florida ha llevado a cabo fumigaciones contra mosquitos en los dos condados circundantes a Sarasota, donde se registraron cuatro casos.
Los CDC recomiendan a las personas tomar precauciones para evitar las picaduras de mosquitos, como usar repelente de insectos y ropa de manga larga. También se aconseja tomar medidas para evitar la presencia de mosquitos cerca de los hogares, como eliminar el agua estancada, un ambiente propicio para la reproducción de estos insectos.
A nivel mundial, se registran más de 240 millones de casos de malaria cada año, siendo el 95% de ellos en África, según los CDC. En Estados Unidos, se diagnostican alrededor de 2.000 casos anuales relacionados con viajes internacionales. Los síntomas de la malaria son similares a los de otras enfermedades e incluyen fiebre, escalofríos, dolor de cabeza y dolores musculares. Si no se trata, la malaria puede ser mortal.