Las altas cantidades de glucosa en la sangre pueden desencadenar enfermedades como daño a los ojos, los riñones o los nervios.
Cuando los niveles de glucosa (azúcar) en la sangre son demasiado altos, se habla de una enfermedad muy conocida, llamada diabetes. Esta misma se divide en varias clasificaciones, como lo son la de tipo 1 y tipo 2.
En el tipo 1, de acuerdo con la explicación de Medline Plus, el cuerpo no produce insulina, que es la sustancia encargada de regular los niveles de azúcar en la sangre. Mientras que en el tipo 2, la (hormona de la) insulina que se produce no es suficiente o no se emplea de la manera correcta.
Asimismo, afirman que altas cantidades de glucosa en la sangre pueden desencadenar enfermedades como daño a los ojos, los riñones o los nervios. La diabetes "también puede causar enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y la necesidad de amputar un miembro. Las mujeres embarazadas también pueden desarrollar diabetes, llamada diabetes gestacional".
Para saber qué tan bien o mal está el azúcar en la sangre, lo recomendable es que la glucemia se mida al levantarse por la mañana y antes del desayuno, y se considera normal si los niveles de glucosa se sitúan entre los 70 y 100 mg/dl en ayunas y en menos de 140 mg/dl dos horas después de cada comida, de acuerdo con el Grupo Sanitas de España.
Lo que podría causar alarma es cuando los niveles de glucosa en la sangre, estando en ayunas, se sitúan entre 100 y 125 mg/dl y después de comer entre los 140 y los 199 mg/dl.
El azúcar que el cuerpo almacena proviene de los alimentos que se consumen, por ello, es importante prestar mucha atención a la cantidad de calorías que contienen los alimentos que se ingieren. Cuando una persona es diagnosticada con diabetes, debe prestar mucha atención a la tabla nutricional que tienen (al menos) los productos empaquetados, pues no todo se puede comer.
De acuerdo con la doctora Odile Fernández, médico de familia en Granada (España), en diálogo con laSexta.com, los alimentos que tienen una menor carga glucémica son, por ejemplo: "las hortalizas como el tomate, los vegetales de hoja verde, todos los vegetales de color naranja, las semillas, los frutos secos (al natural y sin sal), frutas, especias y jengibre".
De igual manera, la experta menciona cuáles son aquellos que deben evitarse a toda costa, entre los que destacan los productos de panadería que se producen en masa (al por mayor), "galletas, snack salados, miel, mermeladas, salsas", entre otros.
Así también está el listado de alimentos que le ayudan al organismo, como por ejemplo, los cereales integrales, incluyendo el pan de este tipo. Por "contener fibra y ser saciantes, aptos y necesarios, por tanto, para dietas de adelgazamiento", según laSexta.com, aunque esto no es necesariamente para personas que estén diagnosticadas con diabetes.
Dicho esto, es de recordar que las personas que padecen diabetes deben tener una alimentación estricta y saludable para evitar que se suban los niveles de azúcar en la sangre. El portal Healthline recomendó algunos panes para dichas personas:
Pan de linaza.
Pan de salvado de avena.
Pan de pita de trigo.
Pan de centeno.
Pan de quinoa.
Pan de cebada.
Pan de 7 granos germinados.
Pan multicereal de trigo germinado.
Por su parte, la biblioteca Medline Plus, reveló qué debe consumir una persona que tenga diabetes:
Frutas y vegetales.
Granos integrales como trigo integral, arroz integral, cebada, quinua y avena.
Proteínas, como carnes magras, pollo, pavo, pescado, huevos, nueces, frijoles, lentejas y tofu.
Fuente consultada aquí.