El cáncer no solo afecta al paciente, sino también a su familia y cuidadores, es imprescindible el apoyo emocional para todos los involucrados.
En el marco del segundo congreso científico del Centro Comprensivo de Cáncer, se destacó la presencia crucial de la psicología y la psiquiatría como disciplinas fundamentales en el abordaje integral del cáncer. La Dra. Ana Cecilia Sala Morales, Psicóloga clínica del centro comprensivo de cáncer compartió valiosas reflexiones sobre el impacto emocional del cáncer y el papel esencial de la salud mental en el proceso de tratamiento y recuperación.
La Dra. Morales comenzó abordando el tema del impacto emocional que conlleva recibir un diagnóstico de cáncer. Según sus palabras, "una persona recibe la noticia de que tiene cáncer y automáticamente piensa en la muerte, definitivamente." De hecho, las estadísticas reflejan que entre un 37% y un 60% de las personas que reciben este diagnóstico lo definen como un evento traumático.
Respuestas emocionales
Las respuestas emocionales de los pacientes al enfrentarse al diagnóstico de cáncer abarcan una amplia gama de sentimientos, tales como ansiedad, depresión, estrés, miedo y tristeza. Estas reacciones no sólo impactan el estado emocional del paciente, sino que también tienen consecuencias significativas en su comportamiento. Por ejemplo, pueden llevar al aislamiento social, cambios en los hábitos alimenticios y de ejercicio, e incluso al uso de mecanismos de afrontamiento poco saludables, como el tabaquismo.
Además, estas respuestas emocionales pueden afectar la adherencia al tratamiento y el proceso de recuperación del paciente.
La Dra. Morales enfatizó que "estas respuestas emocionales no sólo impactan cómo se siente el paciente, sino que también tienen implicaciones conductuales significativas. Por ejemplo, muchos pacientes pueden experimentar ansiedad, depresión o estrés, lo que a su vez puede influir en sus hábitos diarios, como la alimentación, el ejercicio y las interacciones sociales".
Cambios conductuales
Los pacientes con cáncer pueden experimentar una variedad de cambios conductuales a nivel psicológico como resultado de la enfermedad y su tratamiento. Según la Dra. Morales, algunos de estos cambios incluyen:
Cambios en el estilo de vida: Los pacientes pueden experimentar cambios significativos, como la necesidad de ajustar su dieta según se sientan, incorporar ejercicio físico regular (dependiendo de la recomendación del médico), dejar de fumar o por el contrario, aumentar el consumo de sustancias que no hacen bien al cuerpo, pero que por trastornos o decaimientos emocionales suelen implementar.
"Los pacientes pueden desarrollar estrategias de afrontamiento específicas para hacer frente al estrés, la ansiedad y la incertidumbre relacionados con el cáncer." Explica la especialista. "Esto puede incluir el aislamiento, fase de negación en donde pueden presentar ideas de negarse al tratamiento, o directamente empezar a desarrollar algún tipo de trastorno mental."
Impacto en la familia y calidad de vida
El cáncer puede afectar las relaciones familiares y sociales de los pacientes de varias maneras. Pueden experimentar cambios en la dinámica familiar, en las amistades o en el lugar de trabajo debido a la enfermedad. Algunos pacientes pueden encontrar un mayor apoyo en sus relaciones existentes, mientras que otros pueden sentirse aislados o mal entendidos.
La Dra. Morales subrayó que el cáncer no solo afecta al paciente, sino también a su familia y cuidadores. "Cualquiera puede experimentar ansiedad al saber que un ser querido tiene cáncer. Es importante trabajar con los cuidadores, ya que también pueden necesitar apoyo emocional durante este proceso", agregó.
Asimismo, los efectos físicos del cáncer y su tratamiento, como la pérdida de cabello, la pérdida de peso o la cicatrización, pueden influir en la percepción que los pacientes tienen de sí mismos. Esto puede afectar su autoimagen y su autoestima, lo que a su vez puede impactar en su bienestar psicológico y emocional.
En general, los cambios conductuales en los pacientes con cáncer pueden variar ampliamente según las circunstancias individuales y la naturaleza de la enfermedad, pero es importante reconocer que el cáncer puede tener un impacto significativo en diversos aspectos de la vida de una persona y que pueden surgir cambios conductuales como resultado.
Comunicación entre especialistas y pacientes
En cuanto a pacientes en etapa terminal, la Dra. Morales destacó la importancia de brindar apoyo psicológico y emocional para mejorar la calidad de vida. "Trabajamos en equipo con los cuidados paliativos y los médicos para ayudar a los pacientes a atravesar las diferentes etapas emocionales, incluyendo la aceptación y el manejo del duelo".
Además, la especialista también subrayó la importancia de la educación y la comunicación efectiva entre médicos y pacientes. "Es crucial que el paciente se sienta cómodo haciendo preguntas y participando en las decisiones sobre su tratamiento. La ansiedad puede generar muchas preguntas rápidas, por lo que la paciencia y el buen rapport entre médico y paciente son fundamentales", explicó.
En conclusión, la psicología y la psiquiatría desempeñan un papel vital en el tratamiento del cáncer, proporcionando un soporte emocional indispensable para los pacientes y sus familias. Integrar la atención psicológica en el cuidado oncológico contribuye significativamente a mejorar la calidad de vida y el bienestar emocional de quienes enfrentan esta enfermedad.