Es importante tener en cuenta que los factores de riesgo para desarrollar cáncer de seno en hombres y mujeres no son distintos.
El cáncer de mama en hombres es considerado poco frecuente, afectando a menos del 1% de la población masculina. Si bien la mayoría de los casos reportados han sido en hombres mayores, es importante destacar que puede presentarse a cualquier edad.
En una entrevista exclusiva para la Revista de Medicina y Salud Pública, la Dra. Mayra Maldonado, radióloga y Directora del Breast Institute HIMA San Pablo, junto al Dr. Bolívar Arboleda, cirujano oncólogo y director médico del Instituto de Seno del Hospital HIMA San Pablo, enfatizaron en la importancia de que tanto mujeres como hombres con antecedentes familiares de cáncer de seno adopten medidas preventivas.
“Existen imágenes para poder evaluar a los pacientes: si es mayor de 25 años, se puede utilizar la mamografía, y si tiene menos de 25, se puede optar por el ultrasonido, pero es un diagnóstico que se ve mucho mejor en mamografía, especialmente en quienes desarrollan ginecomastia (recrecimiento del tejido mamario)”, aseguró la Dra. Maldonado
El autoexamen es igual de importante para hombres y mujeres
La experta destaca que, aunque no existe un método absoluto para prevenir el desarrollo del cáncer de seno, el autoexamen se considera una manera altamente eficaz para detectarlo. Si el paciente está familiarizado con su cuerpo, puede detectar cualquier cambio y tomar la iniciativa de realizar los exámenes correspondientes.
Dra. Mayra Maldonado, radióloga y Directora del Breast Institute HIMA San Pablo.
Asimismo, es importante tener en cuenta que los factores de riesgo para desarrollar cáncer de seno en hombres y mujeres no son distintos. Sin embargo, el Dr. Arboleda aclaró que la diferencia radica en las pruebas rutinarias que se realizan a las mujeres anualmente como parte de su atención médica preventiva, para detectar posibles cambios o anomalías en sus mamas.
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“En la mujer, rutinariamente, hacemos mamografías, encontramos tumores que todavía ella no ha sentido. En el varón, cuando se palpa algo significa que hay una indicación para hacer un estudio; a ellos no les ordenamos estos exámenes todos los años”, agregó.
Mayor incidencia en la población latina
Es decir, debido al bajo porcentaje de incidencia del cáncer de mama en hombres en general, las pruebas rutinarias para su detección no se realizan de manera sistemática. Sin embargo, el cirujano oncólogo mencionó que, dentro de la población latina, el porcentaje de incidencia puede ser ligeramente mayor. “En algunas poblaciones latinas, la incidencia de cáncer de seno en hombres puede ser mayor, entre 2 % y 3 %”.
Predisposiciones genéticas
Ahora bien, la predisposición genética desempeña un papel fundamental en el desarrollo de esta condición. De hecho, las mutaciones en uno o varios genes, especialmente en el gen BRCA2, pueden aumentar significativamente el riesgo no solo de cáncer de seno, sino también de cáncer de próstata.
“Los hombres también se tienen que examinar, por ejemplo, si la mamá o la hermana tuvieron cáncer de seno, ellos deben hacerse la evaluación genética”, explicó la radióloga, lo cual permitiría actuar de manera temprana y evitar posibles complicaciones.
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Exámenes diagnósticos
“Las guías y las recomendaciones del Colegio Americano de Radiología dicen que las pacientes se deben examinar con mamografía a partir de los 40 años, año tras año. Si existen riesgos, como el historial familiar de mamá o hermana, se puede comenzar 10 años antes de la edad en la que la persona recibió el diagnóstico, pero no antes de los 25 años”, destacó la Dra. Maldonado.
Sin embargo, el ultrasonido es una alternativa válida que no utiliza radiación y es considerado un método más seguro para iniciar el proceso de detección en mujeres. Para la población general, el cribado comienza con la mamografía alrededor de los 40 años, seguida de exámenes anuales. En casos de senos densos o para descartar el cáncer, se puede complementar con un ultrasonido.
Asimismo, la especialista explicó que la biopsia se realiza cuando hay sospechas pero aún no se ha confirmado el diagnóstico, mientras que el Ct y el Bone Scan se emplean para revisar si hay metástasis o avance de la enfermedad. Estos enfoques combinados permiten una detección temprana y un diagnóstico más preciso, contribuyendo así a un mejor manejo de la condición.
Importancia del discernimiento del médico primario
Cuando un paciente acude al radiólogo, generalmente lo hace porque, junto con su médico primario, han identificado algo sospechoso en su cuerpo que requiere confirmación mediante imágenes. Aunque el médico primario no posea toda la especialidad en el caso, debe ser uno de los primeros en asistir al paciente y ayudarle a tomar decisiones informadas.
“Algunas veces a las personas adultas se les niega este servicio de mamografía, ya sea por la edad o por el alto costo para los planes médicos. Sin embargo, cuando ya están en el hospital, se les realiza la mamografía y no se les realiza bien porque no hay una previa capacitación para esto”, agregó la experta.
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Para asegurar una mamografía precisa y que permita determinar la magnitud de la enfermedad, si existe, la paciente debe seguir las siguientes instrucciones proporcionadas por la Dra. Maldonado:
Permanecer de pie durante el examen: Esto ayuda a posicionar adecuadamente los senos para obtener imágenes claras y detalladas.
No respirar durante la toma de la imagen: La paciente debe contener la respiración brevemente para evitar movimientos que puedan provocar borrosidad en las imágenes.
Levantar el brazo: Es posible que se le solicite a la paciente levantar o colocar el brazo en diferentes posiciones para facilitar la captura de las imágenes desde distintos ángulos.
Informar sobre lesiones o fracturas previas: Si la paciente tiene alguna lesión, como una fractura de hombro, es importante comunicarlo al personal médico, ya que esto puede afectar la realización del examen.
El cumplimiento de estas instrucciones es esencial para obtener imágenes de alta calidad que permitan una evaluación adecuada de los senos y, en caso de existir alguna anormalidad, facilitar la detección temprana de problemas mamarios.