La normativa en Puerto Rico comienza con el acompañamiento nutricional solo en diabetes, enfermedad renal, trasplante y obesidad mórbida, pero no se descarta ampliar el acceso a la población con otras enfermedades.
La nutrición es un pilar fundamental en la prevención y el manejo de enfermedades crónicas, y su falta de accesibilidad se ha convertido en un problema crítico de salud pública. De hecho, las enfermedades crónicas requieren un enfoque integral que incluya no solo el tratamiento farmacológico, sino también, cambios en el estilo de vida, siendo la nutrición y dietética una parte esencial.
Conversando en el tercer foro "Salud en tus manos" sobre la implementación de alternativas de salud y la ausencia de servicios de nutrición en el plan de salud del gobierno, se generaron inquietudes entre los profesionales del sector de la nutrición. Una de ellas, la Lcda. Wanda González, nutricionista dietista, destacó los retos y desafíos que enfrenta la implementación de servicios de nutrición bajo la nueva normativa emitida el pasado 13 de mayo.
"El pasado 13 de mayo, recibimos una carta normativa en la cual se indica que los diagnósticos que van a estar siendo cubiertos para servicios de nutrición, son exclusivamente diabetes, enfermedad renal, trasplante y obesidad mórbida". señaló la Lcda. González, quien ha sido proveedora del plan de gobierno durante aproximadamente diez años.
Sin embargo, esta exclusión de condiciones como el sobrepeso, prediabetes, hígado graso, hipertensión y diversas enfermedades autoinmunes ha generado preocupación. "Anteriormente, no se tenía esta situación", señaló la Lcda. González, además, compartió su preocupación por la importancia de los servicios de nutrición para la población pediátrica, especialmente para pacientes con problemas de disfagia, alergias o diagnósticos de autismo, quienes requieren recomendaciones específicas.
"La terapia médico-nutricional es una parte complementaria e importante tanto en la prevención como en el tratamiento médico" argumentó.
En respuesta, la Lcda. Milagros Soto, administradora de cumplimiento y asuntos clínicos de ASES aclaró que "los servicios nutricionales nunca estuvieron cubiertos bajo el plan de salud del gobierno. No es hasta ahora que hicimos una enmienda al plan y logramos incluir esta primera fase en los servicios de nutrición". Explicó que, históricamente, las aseguradoras ofrecían estos servicios a ciertos tipos de pacientes por su cuenta y que esta nueva normativa permite empezar a abrir la puerta para que los nutricionistas estén presentes como proveedores de las aseguradoras. "Comenzamos con estas condiciones, pero no se descarta que más adelante podamos identificar fondos adicionales para seguir ampliando ese acceso a la población", afirmó Soto.
Por su parte, la Lcda. Rosario, directora ejecutiva de ASES, expresó su reconocimiento por la profesión de los nutricionistas y la importancia de su trabajo. "Tengo mucho respeto por su profesión. Nos gustaría tener esa información de usted para verlo con el componente clínico y la parte actuaría de la aseguradora", concluyó, abriéndose a la posibilidad de una segunda fase que podría incluir una ampliación de los servicios cubiertos para abordar otras condiciones de salud.