Los nuevos tratamientos revolucionarios permiten eliminar el virus con pastillas orales y mínimos efectos secundarios.
La hepatitis C, una infección viral que afecta principalmente al hígado y puede permanecer asintomática durante años, ahora tiene una cura altamente efectiva gracias a los avances en medicina moderna.
Según reveló el doctor Federico Rodríguez, hepatólogo y expresidente de la Asociación Puertorriqueña de Gastroenterología, en una entrevista exclusiva con la revista Medicina y Salud Pública.
La hepatitis C se caracteriza por ser una infección que pasa desapercibida para la mayoría de los pacientes. "Muchas veces los pacientes no se dan cuenta que se han infectado con este virus, pueden estar una vida entera con el único síntoma principal, ser cansancio", explicó el doctor Rodríguez.
A diferencia de otras hepatitis, esta variante no presenta los síntomas tradicionales que la gente asocia con la enfermedad. "Uno siempre asocia verdad la hepatitis con volverse a ponerse amarillo [...] Esto no pasa en la mayor de los casos de la hepatitis C. En la mayoría de los casos es una enfermedad completamente asintomática", aclaró el especialista.
Sin embargo, las consecuencias a largo plazo pueden ser devastadoras. La infección crónica "va causando unos daños al hígado que pueden llegar al número de pacientes a lo que se llama cirrosis o cicatrización del hígado, donde en muchos pacientes que desarrollan la cicatrización del hígado eventualmente pueden desarrollar otras complicaciones que lo llevan a trasplante de hígado o a cáncer de hígado".
El panorama del tratamiento ha cambiado drásticamente en los últimos años. Anteriormente, los pacientes enfrentaban terapias prolongadas y poco efectivas. "Inicialmente los tratamientos para la hepatitis C no solamente eran muy poco efectivos, solamente duraban entre un 20% a un 30% de los pacientes, eran largos, tenían muchos efectos secundarios", recordó el doctor Rodríguez.
"Podría estar hasta un año una persona en tratamiento contra la hepatitis C y con muchos efectos secundarios. Era de verdad terrible", añadió, describiendo cómo "para después de un año, a veces había que decirle, tú sabes que no funcionó".
Hoy la realidad es completamente diferente. "Ahora damos medicamentos por boca son medicamentos en pastillas medicamentos que solamente dura su terapia entre dos y la más larga tres meses una pastilla o tres pastillas al día eso es todo", explicó el hepatólogo.
Los nuevos medicamentos, conocidos como agentes de acción directa, representan un cambio revolucionario. Los nuevos tratamientos "pueden curar al paciente cualquier genotipo, hay seis genotipos de hepatitis C", destacó el especialista, quien señaló que tienen una alta efectividad.
"Y cuando el paciente de la hepatitis C se cura, se cura. La hepatitis C es curable, eso es lo importante. No es un virus como el virus del VIH que se puede controlar. Este virus se puede curar y se puede frenar la enfermedad, no regresa", enfatizó el doctor Rodríguez.
La detección precoz es fundamental dado el carácter asintomático de la enfermedad. "Hoy en día se recomienda que esa prueba de anticuerpos para la hepatitis C se haga a toda persona que tenga 18 años o más, por lo menos una vez en la vida", indicó el especialista.
El proceso de diagnóstico es sencillo: "Es una prueba de sangre que detecta si el paciente tiene exposición a la hepatitis C [...] Se hace la prueba se mira tiene anticuerpos entonces se hace una prueba confirmatoria de sangre también que confirma si el virus está en la sangre o no. Y entonces se ofrece el tratamiento".
Ciertos grupos poblacionales presentan mayor vulnerabilidad al contagio. "Las poblaciones a riesgo mayormente son aquellas que están en uso activo de drogas intravenosas, porque al compartir jeringuilla entre una persona y otra, pues si hay una persona que esté infectada tiene la capacidad en tres, cuatro años de infectar a inclusive hasta casi 30 personas adicionales", alertó el doctor.
También señaló a "personas que tengan promiscuidad de sexo traumático, que se llama, por lo menos tener más de 10 parejas sexuales" y a los profesionales de la salud como grupos de riesgo.
Según estudios realizados hace más de una década, "la prevalencia se había estimado [...] un 2.3% de la población y en San Juan un 6%". El especialista considera que "posiblemente hay más de lo que se ha detectado" debido a la falta de estudios más recientes y adecuados.
El doctor Rodríguez hizo un llamado a sus colegas: "Es bien importante que no nos olvidemos de siempre pensar en la hepatitis C, en cualquier enfermedad crónica [...] la hepatitis C se diagnostica fácilmente con una prueba de sangre en el anticuerpo de la hepatitis C y luego que se identifique el paciente pues se puede referir a un especialista que esté adecuadamente entrenado para tratar la hepatitis C".
Con estos avances médicos, la hepatitis C ha pasado de ser una sentencia de por vida a una condición completamente curable, siempre que se detecte y trate a tiempo.