Los diversos cambios epidemiológicos y el proceso de adaptación juegan un papel importante en la salud mental de la población más joven en la retoma de labores.
Eduardo Najar, Katherine Trujillo
Agencia Latina de Noticias Medicina y Salud Pública
Los diversos cambios y el proceso de adaptación juegan un papel importante en la salud mental de la población más joven.
Desde que inició la pandemia, la población que mas sufrió cambios han sido los jóvenes que se encuentran en etapa escolar o universitaria, pues tuvieron que sobrepasar un abrupto proceso de adaptación que trajo consigo la pandemia global a causa del COVID19. La limitación social de este grupo ha ocasionado el desarrollo de episodios de estrés, ansiedad y hasta depresión.
Así lo estipuló en entrevista con Medicina y Salud Pública (MSP) la doctora Karen Martínez, psiquiatra de niños y adolescentes, quien volvió a recalcar la necesidad de estrategias de intervención salubristas que vayan directamente a subsanar el deterioro emocional que ha tenido esta población.
Cabe señalar que recientemente un juez federal denunció la falta de acción de las instituciones penales estatales del país ante los intentos suicidas que han tenido los menores que han cometido faltas.
En los últimos tres años han aumentado los pensamientos suicidas hasta en 17,1 % entre el periodo 2015 al 2019, una cifra que ha ascendido hasta en un 4,8% durante el año 2020, según cifras del Departamento de Salud de Puerto Rico (Estadísticas Preliminares de Casos de Suicidio).
Ante el aumento en el porcentaje de conductas contra la vida, médicos han levantado la voz para la pronta atención urgente en beneficio de este grupo.
“Esto ha sido una situación tan estresante ya que es una situación que continuamente ha cambiado y hemos tenido que ir adaptándonos a cambios bien repentinos. Además de eso viviendo con una incertidumbre de una situación donde es difícil saber cuándo va estar estabilizada, saber cuando nuestra vida va volver a la normalidad por esto todos hemos sido afectados a causa de esta pandemia” indicó la especialista.
La monotonía y el bombardeo de noticias negativas las malas noticias respecto a la pandemia también han colocado a los adolescentes en el riesgo de desarrollar depresión debido a la fatiga emocional, advirtió.
“El estarse adaptando a esta situación afecta nuestra salud mental, trae cansancio, cambios en nuestros estados de ánimo que puede ser de ansiedad pero otra personas lo manifiestan de mal humor y esto puede traer condiciones de salud mental, y yo como psiquiatra ya he notado la presencia de condiciones de salud mental y más que todo al principio de la pandemia veíamos mucha ansiedad y mientras transcurren los meses se ha visto la depresión ya que estamos llegando a un punto donde las personas están perdiendo la esperanza”, agregó.
Sumado a esto, estar en un mismo lugar ha colocado a esta población en un mayor deterioro a nivel físíco y mental.
"Si pensamos en nuestros niños y adolescentes ellos llevan encerrados en su habitación, tomando la escuela en línea en unas cuatro paredes y ese no es el ambiente adecuado para el desarrollo de un niño, un adolescente incluso un universitario, así que ya en esta etapa de la pandemia lo que vemos es que ellos ya no pueden más y para los adultos puede llegar a ser igual de estresante” sostuvo la psiquiatra.
Cuando una persona sufre de estrés es importante determinar el nivel del mismo y el causante principal, con el fin de poder proceder y mejorar la condición en el individuo por medio de un autodominio. No obstante, todas las circunstancias que se han manifestado durante la pandemia pueden ofuscar esta labor.
“El primer punto es identificar el estrés, identificar que estoy llegando a un punto de estrés negativo, pero en la pandemia conocemos el estrés como estrés extremos, que ya estamos en un punto que por más buenos recursos que tengamos de adaptarse de la situación, te va a cansar, te va a causar sentir emociones negativas y entonces llegan a ese punto que se conoce como quemazón, donde tu ya realmente no tienes los recursos para manejar el estrés”, concluye la doctora.