Estudio internacional revela la efectividad de una prueba que identifica resistencias bacterianas en minutos, ofreciendo esperanzas de tratamientos más eficaces y una mejor gestión de la salud pública.
En la lucha constante contra las infecciones bacterianas, la resistencia a los antibióticos ha surgido como uno de los desafíos más críticos de la medicina moderna. Sin embargo, un avance significativo podría estar cambiando el curso de esta batalla. Investigadores europeos, liderados por Jordi Vila, director de la Iniciativa de Resistencias Antimicrobianas en el ISGlobal de Barcelona y coordinador del proyecto BL-DetecTool, han desarrollado una nueva prueba, BL-DetecTool, capaz de detectar rápidamente bacterias resistentes a los antibióticos, reduciendo significativamente el tiempo de diagnóstico y permitiendo un tratamiento más efectivo y personalizado.
Las bacterias resistentes a los antibióticos, como Escherichia coli y Klebsiella pneumoniae, han sido una creciente fuente de infecciones hospitalarias y comunitarias, complicando los tratamientos y aumentando la mortalidad. Estas 'superbacterias' son capaces de inactivar antibióticos, dejando pocas opciones para el tratamiento. La Organización Mundial de la Salud ha catalogado esta situación como una "pandemia silenciosa", con proyecciones de alarmas de mortalidad si no se encuentran soluciones efectivas.
El proyecto BL-DetecTool, iniciado hace cuatro años, ha culminado en el desarrollo de una prueba basada en el inmunoensayo de flujo lateral, una técnica similar a las usadas en pruebas de embarazo y detección de COVID-19. Esta herramienta puede detectar la presencia de enzimas específicas que confieren resistencia a los antibióticos, como las beta-lactamasas de espectro extendido y las carbapenemasas, directamente en muestras de hemocultivos, orina o frotis rectales. Lo notable es que los resultados se obtienen en solo 35 minutos, un avance revolucionario comparado con las 24 horas o más que habitualmente requieren otros métodos.
El estudio evaluó 22.010 muestras biológicas de nueve centros europeos, encontrando una prevalencia de bacterias productoras de beta-lactamasas de espectro extendido entre el 6 % y el 29 %, con una sensibilidad de detección superior al 90 %. La prevalencia de productoras de carbapenemasas fue más baja, pero significativa, revelando la necesidad de crítica de esta herramienta diagnóstica en la práctica clínica.
"Antes se necesitaban al menos 24 horas para tener un resultado, tanto de la posible bacteria como de los mecanismos de resistencia que tiene, ahora los resultados pueden estar en aproximadamente 35 minutos. La información que se genera en el laboratorio de microbiología se manda rápidamente al clínico que ha visitado al paciente y que hasta ese momento solo ha recibido un tratamiento empírico". Explica Jordi.
La rapidez y precisión de BL-DetecTool permiten a los médicos ajustar rápidamente los tratamientos, optando por antibióticos específicos que sean efectivos contra las bacterias detectadas, lo que no solo mejora los resultados clínicos sino que también reduce los costos asociados con tratamientos ineficaces y estadías hospitalarias prolongadas.
A pesar de su efectividad, la prueba BL-DetecTool debe enfrentar desafíos, incluyendo la variabilidad en la especificidad con muestras rectales que requieren un tratamiento previo. Además, la resistencia bacteriana es un fenómeno dinámico que demanda actualizaciones constantes en las herramientas diagnósticas y terapéuticas.
El desarrollo de BL-DetecTool marca un avance significativo en el diagnóstico rápido de bacterias resistentes a los antibióticos, ofreciendo una nueva arma en la lucha contra la resistencia antibiótica. A medida que se expande su uso, podría ser un componente crucial en la estrategia global para controlar la propagación de infecciones resistentes, salvando incontables vidas y mejorando la gestión de la salud pública en todo el mundo.