Afortunadamente, un gran porcentaje de la población logra expulsar el virus de su cuerpo en poco tiempo. Sin embargo, algunas personas no lo pueden expulsar en semanas o meses, y en esos casos, el virus se integra a las células humanas.
El Dr. Humberto Guiot, infectólogo y presidente interino del Centro Comprensivo de Cáncer de la Universidad de Puerto Rico, ha conversado con la Revista MSP frente a su visión sobre el mecanismo biológico mediante el cual el virus del papiloma humano (VPH) contribuye al desarrollo del cáncer cérvico-uterino y otras formas de cáncer.
El experto pudo explicar cómo el VPH, una de las infecciones de transmisión sexual más comunes, pero con más de 200 virus relacionados entre sí, puede llevar a condiciones premalignas y malignas, así como las estrategias de prevención y los avances en detección temprana.
El Dr. Guiot explicó que el VPH "es un virus que se transmite de persona a persona por contacto sexual; se necesita contacto piel a piel o de membranas mucosas para que se transmita de persona a persona". La infección por VPH es extremadamente común. "De todas las personas sexualmente activas, se piensa que el 80-90% de los adultos en algún momento van a estar expuestos al virus del papiloma humano", añadió.
Afortunadamente, un gran porcentaje de esta población logra expulsar el virus de su cuerpo en poco tiempo. "La gran mayoría de las personas logran expulsar el virus y no causa ningún problema", afirmó el Dr. Guiot.
Sin embargo, algunas personas no pueden expulsar el virus en varias semanas o meses, y en esos casos, el virus se integra a las células humanas. "Ese virus se integra a las células humanas, se reproduce perpetuando un ciclo de vida junto a las células humanas, específicamente en las áreas donde puede causar problemas", explicó.
En el caso del cáncer cervicouterino, el VPH se integra en áreas de constante transformación celular en el cuello uterino, donde las células columnares se transforman en células escamosas. "El VPH se integra a esa área y puede llevar a cambios celulares que, al cabo de los años, pueden desembocar en condiciones premalignas de cérvix o útero, o puede llevar al desarrollo de malignidad", explicó el Dr. Guiot.
La vacunación es una de las estrategias más efectivas para prevenir los cánceres asociados al VPH. Sin embargo, existen otras medidas importantes. "Fumar se ha vinculado con el desarrollo de cáncer ligado al virus del papiloma humano en varios estudios", mencionó el Dr. Guiot, sugiriendo que dejar de fumar podría ser una de estas estrategias preventivas.
Además, el número de parejas sexuales también influye en el riesgo de infección. "El número de parejas sexuales se puede vincular con mayor probabilidad de infección con el VPH", explicó, aunque recalcó que, incluso, personas con una sola pareja pueden desarrollar cáncer.
Otros factores de riesgo incluyen tener un sistema inmunológico comprometido. "Las personas que tienen alguna condición inflamatoria, que toman medicamentos que suprimen el sistema inmunológico, personas que viven con VIH/SIDA, personas que han recibido trasplantes [...] podrían tener mayor prevalencia o mayor incidencia del desarrollo de cáncer ligado al VPH", detalló el Dr. Guiot. Por lo que comenta que otra de las estrategias preventivas, sería preocuparnos por mantener nuestro sistema inmune óptimo.
"Detectar temprano los cambios en el cérvix puede ayudar a disminuir la probabilidad de cáncer", afirmó el Dr. Guiot. La prueba de Papanicolaou, es una herramienta clave en esta detección. "Para detectar cambios en el cuello uterino que pueden significar la infección por el VPH y pueden conllevar al desarrollo de cáncer, se estableció desde hace décadas la prueba que todos conocemos que es el Papanicolaou", explicó.
También mencionó un estudio en Estados Unidos que se centró en la detección temprana y el tratamiento de lesiones premalignas en el ano. "En ese caso, se estudió a las personas que más a riesgo estaban de desarrollo de cáncer de ano, que son las personas que tienen el sistema inmunológico deprimido", explicó. El estudio demostró que tratar las lesiones premalignas puede evitar el desarrollo de cáncer, similar a lo que ocurre en el cérvix.
"Esto nos lleva a que tanto en cérvix como en el ano, si detectamos esas lesiones cuando todavía están en un estadio premaligno y las tratamos [...] destruimos esas lesiones y evitamos el surgimiento de cáncer", añadió. Este enfoque ha llevado a la creación de nuevas guías de tratamiento.
El Dr. Guiot. Expresó su agradecimiento a los pacientes que han participado en estos estudios, que pueden ayudar a clarificar el entendimiento de estas condiciones.
"Fue un estudio de casi 5,000 pacientes y más de 300 de ellos fueron reclutados aquí en Puerto Rico", explicó, refiriéndose al mencionado estudio de EE.UU. "Aprovecho la oportunidad para dar las gracias a todos los pacientes que fueron parte de ese estudio porque hicieron historia y permitieron que hubiese representación de pacientes hispanos, específicamente puertorriqueños, en ese estudio que ayudó a la creación de la guía reciente".
El futuro de la investigación en la prevención y tratamiento del VPH es prometedor. El Dr. Guiot mencionó que "hay estadios bien tempranos, por ejemplo, estadio 1, en donde ya el paciente si está bien localizado con solamente remover la lesión, el paciente puede lograr curarse". Además, mencionó el desarrollo de inmunoterapias y vacunas terapéuticas que podrían ayudar a los pacientes a expulsar el virus y prevenir el desarrollo de cáncer.
"Estamos viendo unas vacunas terapéuticas en desarrollo", explicó. " Las vacunas usualmente las conceptualizamos para prevención, pero en este caso se le da al paciente para ayudar a que pueda expulsar el virus", concluyó.