Enfermedad cardiovascular es la causa más frecuente de muerte en pacientes con artritis reumatoide

Según las especialistas, es más probable que estos pacientes desarrollen eventos como insuficiencia cardíaca, infarto de miocardio o accidentes cerebrovasculares.

María Camila Sánchez

    Enfermedad cardiovascular es la causa más frecuente de muerte en pacientes con artritis reumatoide

    En los últimos años, las investigaciones médicas dentro del campo de la reumatología se han concentrado en varios puntos importantes, siendo el riesgo cardiovascular y la mitigación de los factores de riesgo para el desarrollo de enfermedades cardíacas en pacientes con artritis reumatoide (AR), uno de los principales.

    Afectaciones más allá de las articulaciones

    Y es que es importante entender que la inflamación crónica, una característica principal de la AR es la inflamación crónica, que en ocasiones puede afectar otros órganos y tejidos, como los vasos sanguíneos. Del mismo modo, se ha estudiado la liberación de citoquinas inflamatorias, que podrían contribuir al desarrollo de aterosclerosis.

    Por otro lado, es importante resaltar que la AR se ha ligado a varias afecciones que facilitan las condiciones cardiovasculares, tal como es el caso de la diabetes, hipertensión, dislipidemia y obesidad. También es bien sabido que la inflamación crónica por esta enfermedad puede impactar directamente sobre los vasos sanguíneos.

    Escuche el podcast completo aquí.

    Riesgo de mortalidad más alto que la población sin AR

    Recientemente, las destacadas reumatólogas puertorriqueñas Dra. Franchesca Cruz y Dra. Ileana Vázquez, realizaron un podcast exclusivo para la Revista Medicina y Salud Pública, donde explicaron que las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte de pacientes con AR.

    "La enfermedad cardiovascular es la causa más frecuente de muerte en pacientes con artritis reumatoide; el riesgo es un 50% más alto que en la población general", aseveró la Dra. Cruz. "Es más probable que estos desarrollen la enfermedad cardiovascular y que presenten eventos cardiovasculares como insuficiencia cardiaca, infarto de miocardio y derrame cerebral". 

    Por su parte, la Dra. Vázquez explicó que, en los últimos años, se han realizado varios estudios en los que se ha enfatizado que la enfermedad cardiovascular se ve con frecuencia en pacientes con actividad de la AR más alta, al igual que en los pacientes seropositivos.

    "Esto se debe principalmente a que la inflamación de la artritis reumatoide promueve la aterosclerosis y la insuficiencia cardiovascular, que resulta en enfermedad cardiovascular".

    Principales factores de riesgo de la enfermedad cardiovascular

    Varias son las características del paciente con AR que pueden predisponerlo a padecer afecciones cardiovasculares, entre las que se incluyen las comorbilidades y los estilos de vida. Entre ellos se encuentran los eventos cardiovasculares previos, la edad, historial de tabaquismo, hipertensión y diabetes.

    "Cuando estaba en adiestramiento me enseñaron que los pacientes de AR tenían una reducción de la supervivencia de 10 años, principalmente debido a complicaciones sistémicas de la AR activa, y eso se debía a la enfermedad cardiovascular", señaló la Dra. Vázquez.

    Remisión de la AR y mejora en la función cardiovascular

    La Dra. Cruz relata que, en las primeras visitas al consultorio, solicita un panel de lípidos en ayunas, y los reevalúa anualmente, o con más frecuencia en caso de presentarse alguna anomalía o cambio de terapia.

    "La remisión de la artritis reumatoide se correlaciona directamente con una mejora en la función cardiovascular, y en los marcadores de riesgo de la enfermedad cardiovascular, versus aquellos con actividad continua de la enfermedad", señaló la Dra. Vázquez. "Un mejor control de la enfermedad en décadas recientes ha llevado a una mejora de los resultados de enfermedad cardiovascular, especialmente, en términos de mortalidad".

    Mitigar el impacto cardiovascular de la AR en pacientes

    La Dra. Cruz explica que las visitas frecuentes a especialistas permiten un mayor control no solo de la actividad de la AR, sino también conocer la evolución o cambios de algunos factores de riesgo modificables en estos pacientes, como el hábito de fumar.

    "Estas conversaciones continuas y constantes son importantes sin sentir que debes manejar cada factor de riesgo cardiovascular y proveer toda la información al paciente en una visita, pero hay que dar unos recordatorios sobre los factores de riesgo cardiovascular conocidos".

    Además, reconoce que es importante que el paciente también cuente con la opinión y acompañamiento de un cardiólogo que pueda orientarlo específicamente en la prevención de enfermedades cardíacas.

    "Lo otro que encuentro muy importante y eficaz, es tener un buen cardiólogo que le guste a los pacientes, que entienda el riesgo asociado con la AR, que pueda evaluar el riesgo cardiovascular y que pueda dar información adicional para que no seas el único proveedor con la responsabilidad. Creo que es muy efectivo y ayuda a que puedas completar la visita y atender la verdadera causa importante de la morbilidad y mortalidad de nuestros pacientes".

    Desafíos en la reducción del riesgo cardiovascular

    Muchos de las comorbilidades y complicaciones cardíacas están asociadas a la alimentación, pero ambas expertas refieren que hablar y sugerir cambios de alimentación a los pacientes es complicado, pues no todos están en la disposición de hacerlo.

    "A los pacientes no les gusta la parte de la conversación cuando hablo sobre la dieta o el ejercicio", enfatizó la Dra. Vázquez. "Normalmente les digo que tienen dos opciones: la primera es cambiar su dieta y la otra es tomarse un medicamento, y realmente encuentro que más pacientes prefieren tomar el medicamento, que cambiar su dieta".

    Más noticias de Reumatología