La puertorriqueña fue diagnosticada con cáncer gástrico hace 13 años.
Han pasado 13 años desde que Enery Ortiz fue diagnosticada con cáncer gástrico. Desde ese día se enfoca en vivir el presente y valorar cada aspecto de su día a día, que ciertamente considera un regalo.
En medio de una operación estética fue diagnosticada con esta agresiva enfermedad, de hecho, ella afirma que le ocultó al gastroenterólogo que se iba a realizar una lipoescultura y al cirujano no le informó que le habían realizado una biopsia, todo con el fin de que no le cancelaran la intervención que deseaba realizarse.
"En busca de la belleza llegué a ese nivel, pero Dios me dio la oportunidad de llevar el mensaje de que la belleza que en realidad hay que cultivar es interior", expresó la sobreviviente de cáncer.
Enery recibió un gran apoyo en el Hospital Oncológico
Durante el reciente homenaje que celebró el Hospital Oncológico Dr. Isaac González Martínez a los sobrevivientes de cáncer, Enery Ortiz, quien hizo parte del desfile conmemorativo, agradeció profundamente a todo el equipo de profesionales de la salud, especialistas y voluntarios que la atendieron cuando fue diagnosticada.
"Fue un momento donde me encontré. Desde la primera vez que llegué aquí y vi como la gente me trataba con ese amor, con esa empatía, dije, tengo que hacer algo por el hospital oncológico y creamos el Comité de Pacientes y Amigos y salvamos el hospital".
La resiliencia y su amor por la vida la llevaron a luchar contra el cáncer gástrico, superándolo, y convirtiéndose en una mujer de apoyo para otros pacientes. Es así que a través de su liderazgo y el de otras mujeres, conformaron el Comité de Pacientes y Amigos del Hospital Oncológico, el cual continúa hasta el día de hoy fortaleciendo la atención hospitalaria del centro médico.
"Corrí el maratón desde el primer día que me diagnosticaron, el 4 de noviembre de 2010, y decidí que yo iba a ganar ese maratón. Obviamente con Dios, con toda mi familia, en unión con todos, incluyendo las enfermeras del hospital que me atendieron, las voluntarias también", reconoció.
Conozca el testimonio de la sobreviviente de cáncer aquí.
Enery también agradece profundamente el apoyo de su especialista, el Dr. Julio Díaz Padilla, radioterapeuta en el Hospital Oncológico, quien fue la primera persona que supo sobre su diagnóstico.
"El cáncer me llevó a entender y Dios me dio esa sanidad para que yo pudiera seguir compartiendo con todas las personas. Tenemos que aprender a ser felices, a tener un propósito de vida", expresó.
En su proceso de tratamiento, Enery aprendió a valorar cada aspecto de su vida y a su vez le enfatizó a otros pacientes la importancia de tener una comunicación efectiva con los médicos, para hacerle frente al cáncer y no desfallecer en el proceso.
Una de sus máximas consignas hoy en día es ser más agresivos que el cáncer y aferrarse a la vida.
