A pesar de contar con tratamientos avanzados y acceso gratuito a medicamentos, profesionales de República Dominicana, Puerto Rico y Colombia coinciden en que las barreras sociales siguen siendo el principal obstáculo.
En el marco del Día Mundial del VIH/SIDA, especialistas de tres países latinoamericanos se reunieron en un panel organizado por la Revista Médica y Salud Pública para analizar los desafíos que enfrentan los pacientes con VIH en la región.
El encuentro, moderado por la Dra. Lenisse Candelario, contó con la participación del Dr. José Ledesma Báez médico especialista en enfermedades infecciosas de República Dominicana, el Dr. Julio Bacó, vicepresidente de Puerto Rico HIV Treaters Medical Association y el Dr. Pablo Andrés Moncada médico infectólogo de Colombia.
Aunque la medicina ha avanzado significativamente en el tratamiento del VIH, los expertos coinciden en que el estigma social sigue siendo el mayor obstáculo para el diagnóstico temprano y el acceso a tratamiento.
"El principal obstáculo y dificultad que tengo yo en Colombia con los pacientes de riesgo de VIH es el miedo a la enfermedad, el estigma, la enfermedad y los paradigmas de que es una enfermedad fatal en el 2025 cuando ya no lo es", afirmó el Dr. Moncada.
Además de eso, señaló la dificultad que representa que los pacientes deban firmar un consentimiento informado para realizarse la prueba, lo que "genera más parafernalia" y alimenta "la idea de que es algo que la vida se me va a acabar".
El Dr. Ledesma explicó cómo ha evolucionado esta percepción: "Se ha conseguido que se vea ya que este arrastre, este estigma que se vinculaba al VIH, pues ya se ve que es en población, en cualquier parte de la población que puede existir y ha permitido que más personas puedan de una forma libre pues tamizarse, realizarse la prueba y acudir a los servicios de una forma más temprana".
Los especialistas describieron una región dividida entre pacientes con acceso a tratamientos de vanguardia y otros que llegan a consulta con infecciones oportunistas por diagnósticos tardíos.
"Son dos mundos, un espectro controlado, totalmente inmerso, con un buen apoyo médico, un buen apoyo social. Y como lo veo todos los días, es un hospital grande de cuarto nivel y hoy justamente un paciente, una masa intracerebral, VIH positivo, linfocitos 700, diagnóstico principal toxoplasmosis, infección oportunista", compartió el Dr. Moncada sobre la realidad que observa diariamente en su hospital de alta complejidad.
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A pesar de los desafíos, los tres países han logrado avances significativos en cobertura. República Dominicana reporta 79,255 pacientes registrados en su programa de un estimado de 84,000 infectados, cumpliendo con las metas 95-95-95.
El Dr. Ledesma destacó que "a partir del año 2016, el Estado asumió lo que fue la compra completa de los medicamentos antiretrovirales", garantizando acceso gratuito a toda la población.
Puerto Rico, por su parte, cuenta con los medicamentos más avanzados aprobados por la FDA, incluyendo terapias inyectables de larga duración.
"Tenemos aproximadamente 11 regímenes de una sola tableta y estamos utilizando ya los medicamentos de larga actuación, que son inyecciones. El paciente no tiene que tomar ningún tipo de medicamento oral, sino una inyección cada dos meses", explicó el Dr. Bacó.
Colombia ha mostrado avances significativos tanto en tratamiento como en investigación clínica. El Dr. Moncada destacó que "la terapia estándar de hace más o menos dos años es todo lo que es dolutegravir más TDF. El gobierno acaba de comprar el genérico en una sola tableta, TDF emtricitabina dolutegravir".
Sin embargo, reconoció limitaciones en el acceso: "No tenemos inyectables, quiero hacer una pequeña... en términos de PrEP, creo que PrEP sí estamos únicamente en TDF, en emtricitabina y algunos pacientes acceden a TAF"
Los expertos identificaron la falta de integralidad como uno de los principales desafíos. El Dr. Ledesma fue contundente: "El principal reto que nosotros tenemos en República Dominicana es la falta de integralidad. Lamentablemente cuando llega un paciente VIH es como que tiene que verlo el especialista de VIH".
Esta visión fragmentada contrasta con las necesidades reales de una población que, gracias a los tratamientos, está envejeciendo y desarrollando comorbilidades.
"Ese paciente, además de tener un diagnóstico de VIH, integrar las demás comorbilidades como alteraciones, diabetes, problemas de lípidos", señaló el Dr. Bacó sobre la importancia de un abordaje multidisciplinario.
Los tres especialistas coincidieron en que la educación es fundamental, tanto para la población general como para los profesionales de salud no especializados en VIH.
"Tenemos que seguir educando a la población. Vivir con VIH no es un diagnóstico de fatalidad como era antes, mortal. Mientras más rápido tengamos un diagnóstico, mejor va a salir, mejor vas a poder responder al tratamiento, incluyendo vas a proteger a tus seres queridos de transmitir el virus", enfatizó el Dr. Bacó.
El Dr. Moncada destacó la importancia de normalizar las pruebas de VIH: "Es muy importante tanto hacerse pruebas regularmente para VIH, como para otras infecciones de transmisión sexual", señalando que en Colombia enfrentan brotes de otras enfermedades de transmisión sexual como sífilis y MPOX.
La migración representa un desafío adicional para el control de la epidemia. En República Dominicana, la prevalencia en población migrante alcanza el 36%, mientras que en hombres que tienen sexo con hombres ronda el 12% y en trabajadoras sexuales el 5.6%.
El Dr. Bacó destacó el compromiso de Puerto Rico con la población migrante: "Nosotros siempre tenemos nuestras puertas abiertas para darles servicio a todos nuestros hermanos inmigrantes, darle la mejor calidad de tratamiento".
Hacia un futuro sin SIDA
Los expertos concluyeron que, con las herramientas disponibles actualmente, es posible que los pacientes vivan vidas plenas y que la meta de erradicar el SIDA como problema de salud pública está al alcance, siempre que se superen las barreras del estigma y se fortalezca la educación en todos los niveles de la sociedad.
