La capacidad de los médicos de atender este proceso en las mujeres en Puerto Rico debe priorizarse.
En un estudio realizado por un grupo de investigadores en Puerto Rico, estos encontraron que la enfermedad inflamatoria intestinal (EII) podría impactar negativamente en la calidad de vida, factores asociados a la intimidad, la imagen corporal y la actividad sexual en los pacientes con esta condición.
Los especialistas informaron que las enfermedades inflamatorias del intestino (EII) son afecciones crónicas, de los cuales enfermedad de Crohn (EC) y colitis ulcerosa (CU) están incluidos.
En Puerto Rico, la prevalencia de EII aumentó de 38,2 por 100.000 habitantes (1) en 2005 a 181,54 por 100.000 en 2013, siendo la prevalencia más alta de EC en individuos de 20 a 39 años y por CU estar en personas de 50 años y más.
“El aumento en el número de pacientes con EII en nuestra población puertorriqueña exige una evaluación de las características de estos pacientes y subraya la necesidad de desarrollar estrategias adecuadas de atención”, refiere el estudio.
Recalcaron que la sexualidad es un componente importante de la calidad de vida, y en pacientes con EII, es particularmente importante, ya que la enfermedad generalmente comienza durante la adolescencia o la edad adulta joven, un momento en que estos pacientes experimentan hitos del desarrollo importantes a la salud sexual.
“Para mejorar la calidad de vida en pacientes con EII, los médicos deben abordar todos los aspectos de estos pacientes vidas cotidianas En este estudio, nuestro grupo de investigación encuestó función sexual en mujeres adultas con EII y áreas específicas de disfunción en cuanto a su sexualidad”, recomendaron.
En resumen, destacaron que las mujeres con EII son una población en riesgo de desarrollar disfunción sexual, y los médicos que tratan a pacientes con EII deben estar al tanto de estos hallazgos para explorar las preocupaciones de las personas con esta enfermedad y desarrollar estrategias para abordar esas preocupaciones.
Este estudio fue realizado por: Paola K. Pérez-Rodríguez, Dr. Juan M. Marqués-Lespier; Adriana Ortiz; Natalie I. Emanuelli, BS; Grace M. Viñas-Joy, PsyD y la Dra. Esther A. Torres.
El estudio transversal se dirigió a la población femenina, donde las participantes contestaron una encuesta que da cuenta de sus temores y cambios, después de haber sido diagnosticadas con la enfermedad inflamatoria intestinal (EII).
La puntuación media de la función sexual fue de 21,92, otro de los resultados es que a mayor edad, la función sexual disminuyó, es decir, los dominios de excitación, lubricación, orgasmo y satisfacción fueron los más afectados negativamente.
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