Continúa evidenciándose que los anticoagulantes siguen siendo trascendentales en la disminución de fuertes eventos cardiovasculares
Y es que los medicamentos de tipo anticoagulante son un tipo de fármaco esencial en la prevención de padecimientos crónicos vasculares, sobre todo para la manifestación de trombos, una condición que de no tratarse a tiempo podría ser mortal para el paciente, pues estos coágulos pueden trasladarse a órganos vitales y producir incluso la muerte.
Esta vez, un nuevo estudio explica la importancia de un nuevo tipo de anticoagulante, que por medio de una evaluación retrospectiva aquellos pacientes octogenarios con fibrilación auricular que se les administró un anticoagulante oral no antagonista de la vitamina K, presentaron una supervivencia similar de los que recibieron un antagonista de las mismas características.
“Las prescripciones de anticoagulantes orales para los ancianos están aumentando, especialmente desde que se dispuso de los anticoagulante oral no antagonista de la vitamina K. Los datos clínicos sobre octogenarios que toman anticoagulante oral no antagonista de la vitamina K son escasos”, dice el estudio.
De esta manera se demuestra la eficacia de un tipo de anticoagulante que para la literatura no podría tener la misma eficacia que uno antagonista a base de vitamina K.
El estudio
“Se llevó a cabo un análisis post hoc del estudio prospectivo MISOAC-AF sobre cumplimiento de intervenciones antitrombóticas (n=330). Los participantes tenían 80 años o más con fibrilación auricular y habían sido dados de alta de una planta de Cardiología en Salónica, Grecia”, sostiene el estudio.
Luego de las evaluaciones se puede deducir que los índices de mortalidad en algunos pacientes podría ser similar, lo que quiere decir que a aquellos pacientes que se les administró un anticoagulante oral no antagonista de vitamina K, tienen un riesgo de mortalidad mucho más bajo.
Por otro lado, el doctor Jorge Martínez Trabal, médico cirujano vascular. enfatiza en la importancia de este tipo de mecanismos sobre todo en pacientes con algún tipo de fibrilación, pues enfatiza en que esta es la manera principal por la que un paciente se puede beneficiar y disminuir aquellos síntomas que lo aquejan, no obstante, es primordial que se tenga en cuenta que la administración de estos fármacos depende de la recurrencia de la enfermedad y el estado que presente el paciente.
"Dependiendo de la severidad siempre se usan anticoagulantes puede ser por 3 o 6 meses, las guías de manejo recomiendan esto cuando un paciente desarrolla la enfermedad por primera vez, dependiendo del lugar también depende la intensidad. Los factores de riesgo también se deben de tener en cuenta y mientras se remueven estas predisposiciones se debe manejar siempre con un anticoagulante. Si se presenta un segundo evento la recomendación es usar anticoagulantes de por vida" concluyó el Dr. Jorge Martínez.
Fuente consultada: Aquí