Un estudio encontró que el certolizumab pegol, es el medicamento más riesgoso para la proliferación de la psoriasis.
La artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune sistémica, que usualmente es caracterizada por generar rigidez y dolor en las articulaciones. Para tratarla, frecuentemente se acude a fármacos modificadores de la enfermedad (FAME), según destaca el portal especializado Medscape.
Asimismo, apunta que: "Clásicamente se utilizaban fármacos sintéticos, como metotrexato y sulfasalazina, recientemente surgió una amplia variedad de fármacos biológicos o sintéticos dirigidos que ayudaron a mejorar el pronóstico en muchos pacientes con artritis reumatoide. Sin embargo, estos no solo tienen nuevos mecanismos de acción, sino que también se han asociado con otros efectos adversos".
FAME e Inhibidores del factor de necrosis tumoral
Por su parte, los fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FAME) se encargan de prevenir el daño articular y la discapacidad que pueden inducir diversas enfermedades reumáticas inflamatorias crónicas: artritis reumatoide, espondiloartritis axial, artritis psoriásica y lupus eritematoso diseminado.
Mientras que, los inhibidores del factor de necrosis tumoral son medicamentos que ayudan a detener la inflamación y se utilizan para tratar afecciones inflamatorias como la artritis reumatoide, la artritis psoriásica, la artritis idiopática juvenil y la enfermedad inflamatoria intestinal.
Inhibidores del factor de necrosis tumoral y su paradoja
Si bien usualmente se utilizan los inhibidores del factor de necrosis tumoral han demostrado ser efectivos en la artritis reumatoide, presentan un enigma: su relación con la psoriasis.
Es por esto que resulta paradójico que un efecto adverso de estos inhibidores sea la aparición o el empeoramiento de dicha patología en los pacientes con artritis reumatoide.
Por lo que detalla que: "Una hipótesis que explica esta reacción es que el bloqueo del inhibidor del factor de necrosis tumoral resulta en una ausencia de regulación a la baja del interferón alfa en las células plasmocitoides; y el incremento de la producción de interferón alfa se ha asociado con un riesgo aumentado de psoriasis".
Investigación y análisis de eventos adversos
Un grupo de investigadores se centró en describir de manera sistemática esta relación, para lo que recopilaron información de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos.
Para el desarrollo los autores seleccionaron reportes: "En los que se utilizara monoterapia con un inhibidor del factor de necrosis tumoral, metotrexato o fármacos modificadores de la enfermedad para el tratamiento de la artritis reumatoide como única indicación. Se calculó el riesgo de presentar eventos adversos (reporting odds ratio) utilizando el metotrexato como grupo de control".
Resultados y riesgos asociados
Para este análisis se tomaron 112.410 informes de eventos adversos con inhibidores del factor de necrosis tumoral y 6.142 con metotrexato, ante lo que obtuvieron un resultado sorprendente.
Dentro esto descubrieron que la psoriasis como efecto adverso: "tuvo una frecuencia de 0,11%. En comparación, la psoriasis asociada a inhibidores del factor de necrosis tumoral se reportó de 0,29% hasta 1,9%, siendo certolizumab pegol (1,9%) y adalimumab (1,16%) los que tuvieron una mayor frecuencia".
Conclusiones y consideraciones
En este estudio los autores calcularon el reporting odds ratio (informe del radio de probabilidades) para psoriasis en comparación con metotrexato y concluyeron que los inhibidores del factor de necrosis tumoral presentan un riesgo más alto.
"En comparación directamente con otros fármacos para la artritis reumatoide utilizados como grupo de control en lugar de metotrexato certolizumab pegol tuvo una asociación mayor y estadísticamente significativa con los eventos adversos de psoriasis (reporting odds ratio: 1,65; IC 95%: 1,25 a 2,17); incluso en comparación con el segundo agente con mayor asociación (adalimumab)", detallaron.
El estudio encontró que los inhibidores del factor de necrosis tumoral aumentan el riesgo de psoriasis en pacientes con artritis reumatoide, siendo el certolizumab pegol el más riesgoso. Otros medicamentos, no inhibidores, también pueden tener riesgo de psoriasis en comparación con metotrexato.
Opinión de expertos y consideraciones finales
Según el Dr. Javier Merayo Chalico, reumatólogo, en conclusión afirma que los pacientes con artritis reumatoide deben sopesar cuidadosamente los riesgos y beneficios de los tratamientos, especialmente si tienen antecedentes de psoriasis o familiares afectados. La decisión debe ser informada y personalizada, permitiendo terapias más precisas.
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