En sus años como hematóloga ha enfrentado diversos retos en su vida profesional y personal, buscando un equilibrio entre ambas versiones.
La Dra. Liza Vázquez es una hematóloga oncóloga destacada en Caribbean Cancer Care Services, brindando atención en los municipios de Yauco y Ponce. Su dedicación se centra en la asistencia a pacientes afectados por cáncer, demostrando un profundo compromiso hacia su labor médica.
"A mí lo que me entusiasmó de la hematología oncología es que aparte de ser una de las mejores ramas de la medicina, es poder proveer esa esperanza a estos paciente que actualmente están en la lucha continua y activa contra el cáncer", afirmó.
El capítulo de su vida que la marcó a tomar la decisión de escoger su carrera
La oncóloga compartió que su decisión de dedicarse a la hematología oncológica fue influenciada por la pérdida de su abuelo a la edad de 15 años. Este evento crucial marcó un punto decisivo en su vida, motivándola a contribuir en esta subespecialidad médica con el objetivo de hacer su aporte significativo en la lucha contra el cáncer.
"No sólo eso, sino también poder darle todo ese cariño y ese apoyo emocional, aparte de la medicina, no solo a mis pacientes sino también a sus familiares", expresó.
Principales desafíos de su carrera
Ahora bien, la experta mencionó que uno de los desafíos más difíciles que ha enfrentado en su carrera es la conexión emocional que se establece con los pacientes y sus familiares. "Es difícil de controlarlo, uno no es de piedra, uno tiene sus sentimientos y el no sentir esa tristeza es uno de los mayores obstáculos como hematóloga oncóloga".
Por otra parte, la Dra. Vázquez reflexionó sobre su experiencia en oncología y hematología, reconociendo que, si bien enfrentar cualquier tipo de cáncer implica desafíos, el tratamiento de pacientes con leucemias, especialmente en casos de individuos jóvenes, ha sido particularmente impactante para ella. A pesar de la posibilidad de lograr la remisión, persiste un sentimiento desafiante y una identificación emocional al tratar con esta enfermedad.
El equilibrio de su profesión y su vida familiar
"Soy la hija mayor entre 5 hermanos, nos amamos y estamos siempre buscando la atención de cada uno. Además, soy campeona mundial de equitación, la pasión por los caballos de paso fino sigue dentro de mí y es parte de mi vida. Trato siempre de compartir no solamente con mi familia y mi pareja, sino hacer esas cositas que tanto me apasionan", relató.
Mensaje a las futuras generaciones
"A todos esos estudiantes de medicina les exhorto que busquen lo maravilloso detrás de todo esto, es un camino de mucho sacrificio, pero con mucha disciplina y responsabilidad van a lograrlo... los invito a que se queden, Puerto Rico necesita de nosotros, es una lucha que no vamos a dejar caer", concluyó.
