Una pareja de médicos colombianos decidió tomar medidas al respecto y escribir el libro “La adicción en el anestesiólogo: ¿Cómo prevenirla y detectarla?”, el cual ha generado conciencia frente al tema y ha logrado que la comunidad médica preste mayor atención a dicha problemática.
César Fuquen Leal
Agencia Latina de Noticias de Medicina y Salud Pública
Los anestesiólogos se están suicidando y hasta hace un tiempo nadie hacía nada para visibilizar este fenómeno.
Ante este desalentador panorama, una pareja de médicos colombianos decidió tomar medidas al respecto y escribir el libro “La adicción en el anestesiólogo: ¿Cómo prevenirla y detectarla?”, el cual ha generado conciencia frente al tema y ha logrado que la comunidad médica preste mayor atención a dicha problemática.
Los autores del producto editorial son el Dr. Oscar Suárez, anestesiólogo con especialización en epidemiología clínica, y su esposa, la Dra. Marlen Huertas, epidemióloga y auditora. En entrevista exclusiva con la Revista Medicina y Salud Pública (MSP), los galenos evidenciaron la difícil situación a la que el gremio de anestesiólogos se enfrenta con la adicción.
“Se observó que los médicos tenían un problema de adicción, específicamente de opioides. Un gran grupo: los anestesiólogos con una prevalencia de 1% y los residentes con 1.6%, con tasas de 2 a 3 veces mayor que las de otros gremios. (…) La tasa de abuso –de sustancias– es 2 a 3 veces mayor que en otros médicos”,
explicó el Dr. Suárez.
Durante su práctica clínica, el doctor Oscar fue testigo de la muerte de algunos de sus colegas a manos del fentanilo. En conversación con su esposa, la doctora Marlen, debatieron qué papel desempeñaban los organismos de control frente al suicidio de los anestesiólogos. Este diálogo rindió frutos y dio como resultado la creación de esta publicación.
“Hace dos años yo llegaba del trabajo, yo soy anestesiólogo, y le comentaba a la doctora Marlen que murió un colega en un baño con una jeringa de fentanilo. La doctora Marlen me decía: ‘¿y ustedes qué hacen?, ¿qué hace el gremio?, ¿qué hace Colombia, ¿qué hace el Ministerio de Salud?’”,
explicó el especialista.
Las incógnitas antes planteadas generaron en esta pareja de médicos un sentir colectivo para ayudar a disminuir los suicidios por adicción a los opioides.
“(…) El segundo año comenté de nuevo que había muerto una colega de una clínica prestigiosa en su casa con una jeringa de fentanilo. –Con base en este hecho– decidimos generar impacto, decidimos realizar algo para lograr prevenir el suicidio en este tipo de población, en nuestros colegas”,
determinó el galeno.
Posterior a este suceso y tras ocho meses de investigación y recopilación de información sobre el tema, redactaron, corrigieron y publicaron “La adicción en el anestesiólogo: ¿Cómo prevenirla y detectarla?”.
Autores del libro: Dra. Marlen Huertas, epidemióloga y auditora, junto a su esposo el Dr. Oscar Suárez, anestesiólogo con especialización en epidemiología clínica.
La visión de los doctores al escribir el libro rindió frutos, pues la Sociedad Colombiana de Anestesiología (SCARE) creó un plan de contingencia para estos sucesos, que no solo beneficia a los anestesiólogos, sino también a otros médicos sin importar su especialidad.
“Se iniciaron los primeros pasos para generar una ruta de atención en nuestros colegas, entonces ya se hizo la base preliminar para que, si se detecta –adicción– en alguna IPS, hospital o clínica entonces puedan comunicarse con la sociedad y de ahí poder brindarles una ruta de atención”, mencionó el doctor.
El consumo excesivo de opioides como el fentanilo podría generar serias complicaciones de salud en los seres humanos. Los riesgos no solo están relacionados con mortalidad, sino que también se pueden evidenciar alteraciones psicológicas y físicas.
“Los opioides que tenemos son muy potentes. Los anestesiólogos que son adictos a los opioides pueden morir muy fácil porque uno de los efectos es la depresión respiratoria. Cuando tienen adicción no solo psicológica, sino física, y se inyectan todos los días pueden llegar muy rápido a este efecto secundario que es la depresión respiratoria y morir”,
determinó el especialista.
La SCARE decidió financiar este proyecto después de analizar el aporte benéfico que traía a la comunidad médico social.
“Este libro lo enviamos al concurso de investigación de la Sociedad Colombiana de Anestesiología en el 2018 y quedó entre los primeros, ganó la convocatoria y ellos lo publicaron. Es así como el mes pasado -agosto- en el Congreso de Anestesiología, se lanzó el libro y también se realizó una conferencia sobre los problemas de adicción en el anestesiólogo”,
ahondó el Dr. Suárez.
Exaltamos este tipo de estrategias que propenden por el cuidado integral del personal médico y garantizan que haya un equilibro entre lo personal, profesional y laboral. Recordemos que la adicción a los opioides, como lo dice el anestesiólogo Oscar Suárez:
“No es una problemática en Colombia, a nivel mundial también tenemos esta patología, es una enfermedad mental crónica”, concluyó el galeno en diálogo con MSP.