Interrumpir tratamiento inmunosupresor mejora respuesta a vacuna COVID-19 de refuerzo, según estudio

Los resultados completos del ensayo, que incluyó a 383 participantes, indican que la mejora en la protección perdura durante seis meses.

Mariana Mestizo Hernández

    Interrumpir tratamiento inmunosupresor mejora respuesta a vacuna COVID-19 de refuerzo, según estudio

    Un relevante ensayo clínico dirigido por expertos de la Universidad de Nottingham en el Reino Unido ha revelado que las personas con enfermedades inflamatorias pueden mejorar la respuesta de anticuerpos a una vacuna de refuerzo contra la COVID-19 al interrumpir su tratamiento durante dos semanas inmediatamente después de recibir la vacuna.

    La respuesta de los anticuerpos se duplicó a las cuatro semanas y fue un 1,5 veces mayor a las 26 semanas en comparación con aquellos que continuaron con su tratamiento habitual. Esta mejora en la respuesta de anticuerpos se mantuvo durante seis meses, según informan los investigadores en la revista 'The Lancet Rheumatology'.

    Aunque los pacientes que interrumpieron el tratamiento informaron de más reagudizaciones de sus enfermedades inflamatorias en las semanas siguientes, la mayoría de estas reagudizaciones se manejaron de manera autónoma y la mayoría no requirió la asistencia de un profesional de la salud.

    Resultados provisionales

    Los resultados provisionales del ensayo Vaccine Response On Off Methotrexate (VROOM), que limitó su participación a 250 pacientes con un seguimiento de 12 semanas, se publicaron previamente en 'Lancet Respiratory Medicine' y ya han influenciado las directrices clínicas en el Reino Unido y Estados Unidos.

    Los resultados completos del ensayo, que incluyó a 383 participantes, indican que la mejora en la protección perdura durante seis meses. Además, la sangre de las personas que dejaron de tomar metotrexato también mostró ser más eficaz para eliminar la cepa Wuhan y la variante Omicron BA.1.

    Cuando se considera el periodo de seguimiento de seis meses, no se observó un riesgo excesivo de brotes de la enfermedad en los pacientes que suspendieron su tratamiento inmediatamente después de recibir una vacuna de refuerzo contra la COVID-19.

    Estos resultados ofrecen información valiosa para los comités consultivos nacionales de inmunización y otras sociedades especializadas que emiten recomendaciones sobre el momento adecuado para la vacunación de personas tratadas con medicamentos inmunosupresores o que están por iniciar este tipo de tratamiento.

    Ensayo VROOM

    En el ensayo VROOM, participaron pacientes con diversas enfermedades inflamatorias tratados con metotrexato, el fármaco inmunosupresor más utilizado, que se prescribe a 1,3 millones de personas en el Reino Unido para enfermedades inflamatorias como la artritis reumatoide y afecciones cutáneas como la psoriasis.

    A pesar de que el metotrexato es eficaz para controlar estas afecciones y se ha establecido como tratamiento de primera línea, reduce la capacidad del organismo para combatir infecciones y generar una respuesta sólida a las vacunas, incluidas las vacunas contra la gripe, la neumonía y la COVID-19.

    El profesor Abhishek, investigador principal y reumatólogo consultor honorario del Nottingham University Hospitals NHS Trust, subraya que, dada la persistencia del COVID-19 y la aparición de nuevas variantes, es crucial optimizar la protección duradera en personas susceptibles a la enfermedad.

    El profesor Danny McAuley, Director Científico de los Programas NIHR, destaca la importancia de esta investigación al proporcionar evidencia de alta calidad de que la gestión adecuada de los medicamentos en relación con las vacunas puede mantener a los pacientes más saludables y aliviar la presión sobre los servicios de salud.


    Fuente consultada aquí.


    Más noticias de Alergología e inmunología