La OMS identifica el uso inadecuado de este tipo de fármacos como una causa fundamental de esta resistencia.
En los últimos años, el crecimiento de microorganismos resistentes a los antibióticos ha emergido como una seria amenaza para la salud mundial. El impacto de las llamadas "superbacterias" es tan significativo que actualmente matan a más individuos que enfermedades como el VIH/SIDA, la malaria e incluso algunos tipos de cáncer.
Al respecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha designado este fenómeno como una de las mayores crisis sanitarias, atribuyendo gran parte de esta resistencia a un uso inapropiado y excesivo de los antibióticos.
Relación entre contaminación y resistencia
Un estudio reciente, publicado en The Lancet Planetary Health, ha revelado una posible correlación entre la resistencia a los antibióticos y la contaminación del aire. La investigación se enfoca en partículas finas conocidas como PM2,5, que contienen bacterias resistentes y genes de resistencia a los antibióticos.
Aunque los autores señalan que sus hallazgos sólo presentan una asociación y no establecen causalidad, sugieren que la alta concentración de PM2,5 en el aire puede aumentar la resistencia a los antibióticos en la población.
El estudio examinó datos de 116 países entre los años 2000 y 2018, identificando una correlación entre los niveles de contaminación del aire y la resistencia antibiótica. Un aumento del 1% en PM2,5 se relacionó con un incremento del 1,49% en la resistencia de la bacteria Klebsiella pneumoniae a los antibióticos.
Impacto en la salud mundial
A nivel global, un aumento del 10% en los niveles anuales de PM2,5 podría resultar en un incremento del 1,1% en la resistencia total a los antibióticos y aproximadamente 43,654 muertes prematuras atribuibles a esta resistencia.
El impacto diferencial se observó según las regiones geográficas, siendo África y Asia las áreas más afectadas. El estudio modeló diversos escenarios futuros y concluyó que, de no tomarse medidas, la resistencia a los antibióticos aumentaría en un 17% para el año 2050, con un crecimiento del 56% en las muertes atribuidas a esta causa.
Sin embargo, si se lograra reducir los niveles de PM2,5 de acuerdo con las pautas de la OMS, la resistencia a los antibióticos podría disminuir en un 16,8% y se preveniría un 23,4% de las muertes relacionadas para el año 2050.
Limitaciones y futuro del estudio
A pesar de estos hallazgos, los investigadores reconocen limitaciones en su estudio, incluyendo la falta de datos completos de algunos países y la presencia de otros factores que podrían estar influyendo en la resistencia a los antibióticos. Expertos señalan que, si bien estos resultados son prometedores, se requiere una mayor investigación para comprender plenamente la relación entre la contaminación del aire y la resistencia a los antibióticos.
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